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Un delfín que vivía aislado en un acuario abandonado de Japón falleció tras dos años de permanecer sin recibir visita alguna, a pesar que hubo organizaciones que intentaron liberarlo.
“Honey”, un delfín hembra, quedó abandonado en el acuario del Parque Marino, al este de la ciudad de Tokio. Otros 46 pingüinos, peces y reptiles corrieron la misma suerte que el cetáceo. Un empleado era el único que alimentaba a los animales desde que el recinto cerró en 2018.
Desde Dolphin Project, una Organización No Gubernamental dedicada al bienestar y cuidado de los delfines, se había intentado trasladar al animal desde hace más de un año, pero las conversaciones con los responsables del acuario no llegaron a un acuerdo.
Según revela la ONG, en noviembre de 2018, el acuario estaba endeudado y buscando un comprador. Al año siguiente, en 2019, descubrieron que el acuario había sido vendido, y junto con él, “Honey”.
Un video de Dolphin Project mostraba en septiembre de 2018 la difícil situación de “Honey”, que se vio obligada a vivir sus últimos días en un pequeño tanque sin ninguna estimulación o interacción con nadie ni nada.
La situación de "Honey" atrajo la atención mundial, y provocó un gran movimiento dentro de Japón.
"Honey seguirá siendo la imagen del cautiverio de delfines durante muchos años", reza el comunicado de la entidad.
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*Lee aquí la alerta difundida por Dolphin Project
