Cuando piensas en un lugar para descansar a la orilla de la playa, Monterrico es uno de esos sitios preferidos por muchos guatemaltecos. La tranquilidad del área es el principal atractivo.
Sin embargo, ¿Sabías que este lugar está dentro de una reserva natural? La Reserva Natural de Usos Múltiples Monterrico es el hogar de una gran cantidad de especies como aves, reptiles, peces, crustáceos y otros ejemplares.
“La Reserva Natural de Usos Múltiples Monterrico es parte de los humedales de la Costa Pacífica, ecosistemas clave para el funcionamiento de las cuencas de los ríos María Linda, Paso Hondo, Los Esclavos, los sistemas costeros; y los procesos hidrológicos y ecológicos propios de estas cuencas”, explica Ana Silvia Morales, del Centro de Estudios Conservacionistas (CECON) de la Universidad de San Carlos.
Gracias a esa diversidad, en Monterrico puedes embarcarte sobre el canal de Chiquimulilla para observar aves residentes y migratorias, especialmente durante el invierno en el hemisferio norte.
“La época migratoria de aves inicia en noviembre y termina en febrero, muchas aves se quedan en Guatemala por contar con un clima más benevolente. Dentro de las especies más relevantes que se pueden encontrar están los pelícanos, patos, garzas, espátulas rosadas y pico de zapato. También llegan chipes”, resalta Morales.
Algunas personas hacen recorrido por el canal para hacer avistamientos de aves, principalmente antes del amanecer o al final de la tarde pues es cuando se puede observar el mayor número de especies que anidan sobre los manglares o los tulares.
Biodiversidad en peligro
Sin embargo, la zona se ve amenazada principalmente por las actividades de los seres humanos que afectan a varias especies como a las tortugas.
“Si bien el área es muy conocida por la recreación y vida nocturna, lo más importante para un visitante es saber que está dentro de un área protegida, y que por lo tanto las actividades que se desarrollen deben ser compatibles con los objetivos del área. Por ejemplo, las playas son zonas de anidación. Sin embargo, es muy frecuente que algunos turistas ingresen vehículos a dichas playas arriesgando la vida de especies tan importantes como las tortugas marinas”, resalta la experta.
Entre los vehículos que con más frecuencia se movilizan sobre la arena son las cuatrimotos y debido a su gran peso, pueden destruir los nidos de las tortugas. También el uso de luces desorientan a estas especies cuando buscan un lugar donde depositar sus huevos por las noches.
La basura que se deja tirada en la arena también es otro de los factores que amenazan a estas especies, sin dejar por un lado la caza furtiva de huevos de parlama para consumo.
El Consejo Nacional de Áreas Protegidas trabaja de la mano con el CECON dentro de esta reserva un proyecto de reproducción, conservación, educación y repoblamiento de especies amenazadas en el área, entre las que se encuentran las iguanas, tortugas de estero, caimanes y pez armado o pejelagarto.
“El objetivo del área protegida es la conservación, uso sostenible y restauración de los ecosistemas y biodiversidad presentes en el área que son compatibles con los objetivos del Sistema Guatemaltecos de Áreas Protegidas, y se encuentra clasificada como categoría III, es decir que está permitido el actividades productivas de tipo sostenible y compatibles con el área”, refiere Ana Silvia Morales.
Así que cuando vayas a Monterrico disfruta del área, pero bajo la responsabilidad de ser amigable con la zona para que siga siendo el hogar de miles de especies vivas.
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