El primer mundial de la Historia se disputó en 1930 en Uruguay, país que en aquel entonces era campeón olímpico de fútbol y que terminó proclamándose también vencedor en este torneo al ganar a Argentina en la final 4 -2. El tercer lugar fue para Estados Unidos.
En total, fueron 13 equipos los invitados por la FIFA, incluyendo cuatro europeos: Francia, Bélgica, Rumania y Yugoslavia. Los seleccionados de estos países tuvieron que viajar por vía marítima hasta Río de janeiro y, de ahí, por tierra hasta su destino final, Montevideo.
Todos los encuentros se llevaron a cabo en la capital uruguaya, siendo el francés Lucien Laurent el primer goleador mundialista, en el partido de apertura en el que los galos se impusieron 4 a 0 sobre México.
El argentino Guillermo Stabille fue quien logró el Balón de Oro en esta ocasión.
El afiche que se utilizó muestra a un arquero atajando un tiro en el ángulo superior de la portería y fue diseñado por el uruguayo Guillermo Laborde en estilo Art Déco.
Aunque se indica que la competencia se llevaría a cabo entre el 15 de julio y el 15 de agosto, finalmente el Mundial se desarrolló entre el 13 y el 30 de julio.
En estas fechas, Europa se encontraba inmersa en una profunda crisis económica y por ello la realización del Mundial no suscitó mucho entusiasmo fuera del continente americano.
Otra curiosidad es que no hubo fase clasificatoria y el sorteo se realizó cuando todos los equipos se encontraban ya en Uruguay, que ese mismo año celebraba también sus 100 años de independencia.
La copa "Victoire aux Ailes d´Or" fue diseñada por el escultor francés Abel Lafleur. Esta tenía de 30 centímetros de alto, fabricada en oro y un peso de 4 kilos; fue recibida por el capitán uruguayo José Nazassi.