La joven de 16 años fue torturada y secuestrada durante un mes por su novio de 49 años, sin que sus padres pudieran hacer algo.
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Todo comenzó el 6 de abril de 1996, cuando James Smith llamó a la policía de la localidad inglesa de Greater, cerca de Manchester, para avisarles que su novia de 16 años, Kelly Anne Bates, había sufrido un accidente en la bañera que le ocasionó la muerte.
El hombre a través del teléfono se escuchaba muy calmado y afirmó que intentó resucitarla aunque no tuvo éxito.
Sin embargo, la escena era atroz, ya que por todos lados se encontraban manchas de sangre en los azulejos y el cuerpo de la adolescente presentaba cortes y estaba desfigurado por los golpes.
La escena de terror
Lo que sucedió en realidad es que James Smith en Manchester, Inglaterra, masacró hasta la muerte a su novia de 16 años, Kelly Anne Bates, durante cuatro semanas.
Sin embargo, después de la denuncia falsa y la historia inventada por Smith, la policía lo detuvo. Al revelarse los resultados de la autopsia se mostró que el hombre había masacrado brutalmente a Kelly Anne Bates por semanas antes de asesinarla.
De acuerdo con la autopsia que se realizó en el cuerpo de Bates, se encontraron 150 lesiones que pudieron ser realizadas en el último mes.
Durante el tiempo que la joven fue secuestrada por su novio. Kelly fue estrangulada y apuñalada en las piernas, el torso y la boca.
James Smith contaba con un largo historial de abuso de las mujeres con las que había convivido antes. Su primer matrimonio terminó por acusaciones de violencia física. Y otras mujeres con las que James también había salido narraron sucesos similares.
Cuando se realizó el juicio, algunas mujeres de las que Smith había abusado se hicieron presentes para pintar un cuadro de un hombre misógino que era compulsivamente celoso y utilizaba la violencia para poder controlar a los demás como el deseaba.
¿Y los padres de Kelly?
Cuando la menor presentó a su novio, el hombre se presentó afirmando que tenía 32 años y que amaba a su hija. A la madre nunca le gustó esta diferencia de edad y desde ese momento le generó mucha desconfianza, sin embargo, no pudo hacer nada por alejarlos.
Durante los siguientes meses Kelly se fue a vivir con él y cada se comunicaba menos. Una vez que pasó a visitarlos, su mamá notó moretones en sus brazos.
Una señal de alarma que la joven minimizó cuando su madre intentó preguntarle. "Me caí en la puerta de la casa por un escalón húmedo por la lluvia", dijo Kelly Anne mientras se iba rápido y tras un saludo frío.
Luego de unos meses, el abusó aumentó hasta el día en que el hombre acabó con la vida de la adolescente.