Hannah Neeleman, es una influencer y exbailarina de ballet profesional que se convirtió en una "esposa tradicional" y madre de ocho hijos.
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La famosa influencer Hannah Neeleman, más conocida en redes sociales como "Ballerina Farm", da a conocer su día a día en una granja de Utah, Estados Unidos, junto a sus ocho hijos y esposo; quien se dedica a elaborar alimentos desde cero a base de ingredientes cosechados por la familia.
A través de la cuenta de la creadora de contenido que posee más de 8 millones de seguidores en TikTok, se observa el trabajo duro que realiza en su hogar donde no se permiten los celulares, tablets o televisor, con excepción del dispositivo con el que se maneja el perfil de "Ballerina Farm".
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Sin embargo, en un artículo publicado por "The Times", Hannah Neeleman fue descrita como "la reina de las tradwifes", un movimiento que destaca un estilo de vida basado en los ideales cristianos de los años 1950 y 1960, los cuales señalan que la mujer debe dedicarse al hogar y la familia. En ese sentido, la esposa le debe obediencia a su esposo y el hombre tiene el rol de proveedor principal.
Sin embargo, antes de llamarse "Ballerina Farm", Hannah era una bailarina de ballet que pertenecía a la Academia Juilliard, una de las instituciones más prestigiosas en el mundo que acepta únicamente a 24 estudiantes por año.
"No siempre quise esta vida. Me fui de casa a los 17 años y estaba emocionada de llegar a Nueva York, me encantaba la energía de la ciudad. Y quería ser bailarina, era buena", sostuvo Hannah para The Times.
La influencer conoció a su esposo cuando él tenía 23 e inmediatamente quiso que ambos se casaran. Por seis meses, intentó conquistarla pero logró hacerlo cuando "casualmente" se encontraron en un vuelo, sentados uno al lado del otro. Hannah creyó que era el destino, mientras que Daniel omitió que su padre era el dueño de la aerolínea y él había arreglado todo para el encuentro.
"En aquel entonces pensé que debíamos salir juntos durante un año. Así podría terminar la escuela y todo lo demás. Y Daniel me dijo: 'No va a funcionar, tenemos que casarnos ahora'", indicó Hannah. "Pero sabía que cuando empezara a tener hijos mi vida empezaría a verse diferente".
No pasó dos meses y la pareja ya se había casado. Un año después se convirtieron en padres de su primer bebé, y desde ese momento, cada nueve meses desde el nacimiento de un hijo, vuelve a quedar embarazada.
La famosa influencer ha señalado que no se considera una mujer sometida ni víctima, ya que desde su punto de vista no es una "tradwife".
"Somos tradicionales en el sentido de que somos un hombre y una mujer, tenemos hijos, pero siento que estamos allanando muchos caminos que no han sido pavimentados antes. Entonces, tener la etiqueta de mujer tradicional, pienso que no sé si me identifico con eso", expresó la tiktoker.
