Jorge Tello es guatemalteco y lleva más de 30 años vistiendo a los mejores mariachis de Estados Unidos o, al menos, a los que más se preocupan por su estilo.
Tello ha diseñado trajes de mariachi para artistas como Carlos Santana o Plácido Domingo. Además también diseñó los pequeños trajes de mariachi para los perros de la película "Un chihuahua en Beverly Hills 3".
Un reportaje del periódico "Los Angeles Times" cuenta su historia como sastre que inició cuando todavía era un niño de 11 años y ayudaba a su padre, que también era sastre, en Guatemala.
Llegó a Estados Unidos porque un amigo de la familia lo convenció al ver su talento y fue a los 30 años, cuando huyó para no casarse, que llego a Los Ángeles y empezó a trabajar en la empresa "Arte Charro".
Durante muchos años imitó el acento mexicano para que sus clientes no supieran que era guatemalteco, porque creía que le quitaría fama como "sastre de mariachis", pero ya no.
Ahora todos saben que es guatemalteco y su tienda está decorada con un enorme quetzal en la pared.
Su local está ubicado enfrente de la Plaza Mariachi y lo maneja con ayuda de su esposa, quien vendía decoración para los trajes, y su hermana que también aprendió el oficio.
Sus trajes pueden llegar a tener cristales Swarovksi, a petición de los clientes, o incluir grandes cinchos de piel de serpiente o botones de oro y plata.
"El maestro", como lo llaman sus clientes, espera que su hermana Marta pueda continuar con el oficio que su padre les enseñó.