Estaba todo listo. Los pandilleros se preparaban para llevar a cabo un ataque armado. En la mira tenían a un comerciante de la zona 6, pero tenían un problema. Debían llevar un arma ilegal y no sabían cómo esconderla sin ser detenidos por la Policía Nacional Civil (PNC).
De repente, uno de ellos tuvo una idea que parecía brillante: Esconder el arma de fuego en un pastel y así simular que irían a celebrar un cumpleaños.
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Todo iba bien, el pastel hasta se veía delicioso. Sin embargo, su plan se vino al suelo cuando fueron sorprendidos por los agentes de la PNC. Ahora están capturados.
Según información de la policía, los pandilleros fueron descubiertos debido a información de inteligencia.
Les hicieron el alto, ellos dijeron que iban a celebrar con unos amigos, pero "una revisión minuciosa" logró determinar que en lugar de relleno de frutas, el pastel llevaba una pistola Bersa .40, una tolva y 11 municiones útiles.
Por este hecho se detuvo a Dulce Marilú López González, de 21 años y un adolescente de 16.
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