Expertos debaten las principales diferencias que expone la Biblia y la ciencia sobre la muerte de Cristo.
OTRAS NOTICIAS: Descubren un macabro "pozo de los deseos" con extraños objetos dentro
La muerte de Cristo es un tema de suma importancia en la religión cristiana.
Sin embargo, también se ha convertido en el punto de debate entre grandes expertos y estudiosos de la historia y la ciencia por una razón.
Y es que la Biblia establece explicaciones que se diferencian en varios aspectos a lo que dicta la ciencia sobre la muerte de Cristo.

¿Qué dice la Biblia?
De acuerdo con los Evangelios del Nuevo Testamento, Jesús murió crucificado en el Gólgota, cerca de Jerusalén durante el gobierno del romano Poncio Pilato.
La crucifixión era una práctica común de ejecución que los romanos utilizaban en aquella época. En la Biblia se dice que Jesús fue azotado y coronado con espinas para luego obligarlo a cargar su propia cruz.
También relata que tras su muerte, su cuerpo fue colocado en un sepulcro y resucitó al tercer día.
¿Qué dice la ciencia?
Expertos señalan que la crucifixión pudo causarle la muerte a Jesús debido a la deshidratación, asfixia o hipovolemia (pérdida grave de sangre).
Otros profesionales exponen que Jesús podría haber sobrevivido a la crucifixión durante más tiempo si se hubiese tratado correctamente.
También sugieren que su muerte se pudo deber al síndrome de Takotsubo, también conocido como el "síndrome del corazón roto".
Este consiste en la contracción temporal del músculo del corazón causada por el estrés emocional intenso y que puede terminar en insuficiencia cardíaca aguda y hasta muerte.