El jugador francés dejó las canchas y atraviesa una crisis acusado de abusos sexuales.
EN CONTEXTO: Jugador del Manchester City enfrenta séptima acusación de violación
Benjamin Mendy, futbolista del Manchester City, vive una auténtica pesadilla desde que ingresara en prisión en septiembre, acusado con siete cargos de violación.
El francés fue trasladado desde la prisión en la que se encontraba en Liverpool a la HMP Prison de Manchester, comúnmente conocida como Strangeways.
Las autoridades penitenciarias del Reino Unido autorizaron el traslado del futbolista a una cárcel de máxima seguridad ya que temían por la seguridad y la integridad física de un Mendy que pasó la Navidad en una de las cárceles más duras del país, donde fue trasladado el pasado 23 de diciembre.
Louis Saha Matturie, el otro acusado de los siete cargos de violación junto a Mendy, también ha sido trasladado junto al jugador citizen.
Los testigos aseguran que el cambio de prisión se debió al temor a un ataque al francés.
"Tanto Mendy como Saha han sido trasladados por tratarse de un caso tan mediático. Había que velar por su seguridad y se entendió que una prisión de categoría A estaría mejor equipada para hacer frente a posibles situaciones de riesgo", destaca el informe.
El defensa francés ya vivió una situación de riesgo en su primera noche en la prisión de Chester.
Mendy entró en shock cuando vio su celda y a sus compañeros por primera vez. Al parecer, debido a un error de entendimiento causado por el idioma, pensaba que iría al ala VIP cuando, en realidad, había sido asignado al ala VP.
Esta última tenía por objetivo mantener protegidos a los presos que sean vulnerables a agresiones por parte de sus compañeros.