Según el director ejecutivo de la Cámara Guatemalteca de la Construcción (CGC), la corrupción ha impactado en todas las esferas, y particularmente en el sector de la construcción, sobre la afectación que representa en la obra pública.
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José Fernando Orellana Wer, director Ejecutivo de la Cámara Guatemalteca de la Construcción (CGC), en entrevista con Soy502 explicó que los actos de corrupción que se han destapado en el país exponen una realidad campante que ha sido constante y que no ha sido abordada de raíz, sin embargo, este es el mejor momento para buscar soluciones e impulsar procesos transparentes.
Según Orellana, el diagnóstico que la Cámara tiene es que el sistema no sirve, es arbitrario, opaco y poco funcional, cuando de obra pública se habla.
Todos estos factores que derivan de la corrupción han impacto de forma negativa en la sociedad, por ejemplo, en quienes no cuentan con un puente peatonal, una escuela, drenajes, una acera, hasta la construcción de carreteras o megaproyectos que inciden en el desarrollo del país.
Mismo que ha impactado en la construcción de infraestructura vial, oscilado hacia la baja en los últimos años, explicó Orellana, pues, desde el periodo de gobierno 1996-2000 a la fecha, el tiempo en el que menos infraestructura vial se construyó fue en le gobierno de Jimmy Morales, con tan solo 289 kilómetros de infraestructura.
De modo que, al analizar de forma profunda estos eventos asociados a la corrupción, nació la intención de trabajar en un documental que expusiera el lado oscuro de lo que se vive cuando se está expuesto a un sistema donde el pago de coimas, los sobornos y la poca capacidad técnica para la construcción se vuelve una práctica.
De esto se trata la producción "Relaciones peligrosas: infraestructura, la corrupción como costumbre", producido por Naranja Media y presentado en la Cámara Guatemalteca de la Construcción, el martes 13 de febrero.
Motivaciones para la producción
Orellana a explicó que el documental es el relato en 30 minutos de la experiencia de ciudadanos de a pie con falta de infraestructura y obra pública en su comunidad, es la voz de quienes fueron contratistas en el estado y decidieron dejar de contratar con este por un ambiente hostil y de corrupción.
Otra de la motivación no es solo contar la historia, sino crear la discusión de la falta de transparencia, que si bien ocupa espacios públicos, dijo Orellana, nunca se le había dedicado tanto tiempo a explicar cómo funciona este problema. Y estas son las dos vertientes que el presidente de la Cámara cita.
- El sistema no sirve porque hay coimas para entrar al negocio de la construcción con el Estado y hay que pagar al poder político.
- El sistema no funciona porque es ineficiente, hay ausencia de personal técnico en el sector público. El sistema de precalificado también es arbitrario, y de esa cuenta hay empresas nuevas que entran a contratar con el estado con costos exorbitantes, pero donde las juntas de licitación cumplen una función de cajas negras.
Orellana continuó explicando que una parte del sistema de contratación de obra pública opera con formato de empresas de cartón que se constituyen sin tener capacidad técnica ni financiera, el verdadero dueño resulta tener una buena relación con autoridad política y con pocos escrúpulos para comprar voluntades a quienes están en posición de tomar decisiones.
El ejecutivo de la Cámara dijo que Guatemala no puede seguir al ritmo en el que se ha venido propiciando el desarrollo de la infraestructura vial, "nuestra infraestructura vial es vergonzosa", puntualizó.
Agenda para la transparencia
En cuanto al papel de la Cámara Guatemalteca de la Construcción como un ala del Sector Privado, busca impulsar una agenda con acciones concretas para empezar a cambiar el sistema que ha venido imperando en el país. De hecho, José Fernando Orellana explica que ve con buenos ojos la administración asumida por Bernardo Arévalo y Karin Herrera, pues, considera que la voluntad política que la actual administración tiene marcará la diferencia de los actuares.
Por otro lado, se refirió al papel de la auditoría ciudadana para el avance de procesos que coadyuvarán al mejor desempeño del sector y de quienes en lo sucesivo vuelvan a retomar la contratación con el Estado, de modo que con los acuerdos mínimos intersectoriales se logre construir un sistema que impulse el desarrollo de obra pública
Además, se refirió al papel que la Ministra de Comunicaciones Jazmín de la Vega asume en este entramado y valora la apertura de parte de este organismo de Estado con quien conversaron de la transparencia a la hora de licitar, cotizar y adjudicar la obra pública.
"La ministra fue muy clara con su alocución en cuanto a la auditoría que llegó a hacer a la institución para determinar la situación actual de la institución y posteriormente impulsar juntas de licitación y cotización técnicas y capacitadas.
