El presidente Bernardo Arévalo participó en la reunión entre Atlantic Council, el sector privado y otros actores económicos del país.
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El presidente Bernardo Arévalo participó en la reunión con la organización Atlantic Council, un grupo que aglutina a empresarios y líderes de Estados Unidos que procuran estrechar lazos de cooperación económica, de inversión y proyectos de desarrollo en diferentes partes del mundo.
En su discurso de inauguración, el mandatario enfatizó que el país que Guatemala es hoy está vinculado con la trayectoria comercial y política con la economía más grande del mundo, Estados Unidos, y es una relación estratégica por la cercanía al centro neurálgico y la economía global, dijo Arévalo.
También valoró la proyección que el país del Norte ha permitido estrechar con Guatemala y el beneficio que representa para Guatemala, para las empresas y la población en general.
Áreas de inversión
El presidente volvió a recordar las áreas en las que su gobierno se enfocará y donde buscarán invertir, siendo éstas: educación de calidad, salud, agua potable y electrificación.
Arévalo recordó que esta búsqueda de apoyo y de cooperación económica se ha mantenido con el gobierno de los Estados Unidos, de ahí el acercamiento que tuvo en sus primeros días de gobierno con Samanta Power, con quienes también hablaron de inversión extranjera y de proyectos que propicien el desarrollo de la sociedad guatemalteca.
Además, hizo hincapié en que para que las condiciones de inversión y de crecimiento económico se den es necesario el fortalecimiento de las instituciones del país y la recuperación de estas, así como la lucha por la justicia, donde se construya una economía a la vez productiva y justa, con reglas claras y estables, en un estado de derecho, democrático y fuerte cumpla con su mandato, donde no se abuse de sus facultades.
Bernardo Arévalo se despidió enfatizando que este es un momento peculiar y donde se está frente a una ventana de oportunidades, pues la relación entre ambos países se ha fortalecido y trabajado en un marco estratégico de inversión, donde el papel del Estado implica la participación activa del estado para dignificar la vida de los ciudadanos.
