Escribir una columna de opinión es como lanzar una botella al mar, después de arrojar el mensaje piensas ¿a dónde llegará esto? Es entretenido imaginar quién está del otro lado de estas palabras, qué piensa, cómo ve el futuro, qué retos enfrenta en el presente y qué cargas trae consigo del pasado.
Seguramente seas uno de esos ciudadanos atormentados por el tráfico mañanero en nuestras ciudades mal planificadas. Te enfada profundamente que bloqueen las carreteras reclamando cosas desconectadas de tu vida y desconfías de esos potentados empresarios que se ven tan alejados de la realidad que padeces. No inviertes tu tiempo demasiado en política pues tienes que trabajar, pero no la rechazas. Te preocupa tu país y la podredumbre del sistema por eso quieres creer en alguien diferente pero no le vas a dar tu lealtad de gratis a nadie. Eres una persona religiosa pero no tan conservadora como tus padres y cada vez desconfías más de los que negocian con la fe.
Déjame decirte que, sin pretender sonar a farsante de autoayuda, eres buena parte del presente y casi todo el futuro de este país. Joven, clasemediera y urbana será la demografía predominante en los próximos años. No solo serás el núcleo productivo de Guatemala sino que formarás parte del nicho de votos más amplio. Cada vez más los partidos, si son listos, pedirán tu confianza, apelarán a tus problemas y tratarán de convencerte.
Estos vibrantes cambios sociales vienen de la mano de 2015, año que rompió el sistema político. El año 2019 será el punto de inflexión, el que decidirá si tenemos respuestas distintas a la corrupción para hacer política o si volveremos a una versión 2.0 de las viejas mañas. Gente como tú será mayoría entre los participantes en ese proceso electoral y tendrán por tanto la última decisión.
Lo que nos espera es por un lado conocido, la urbanización, aunque tendremos que hacerla a nuestra manera y a estas alturas del siglo XXI y, por otro, completamente impredecible. Habrá que hablar los próximos años de todo lo que nos traerá el futuro cercano. De globalización y de robótica, de indigenismo urbano y del futuro rural. De pena de muerte y de violencia, de sexualidad más abierta y de las exigencias políticas y sociales del cosmopolitismo. Qué privilegiados nosotros, tú y yo, que tenemos estos espacios fuera de la lógica mentirosa de los canales de Ángel González para compartir las muchas preguntas y las pocas soluciones para ti y tus circunstancias. Tú, que eres urbano.
Las opiniones expresadas en las columnas de opinión son responsabilidad del autor, no de Soy502.
