El abogado Roberto Molina Barreto busca conseguir, por tercera vez, el cargo de magistrado titular en la Corte de Constitucionalidad (CC).
El jurista ha ocupado esa posición durante los últimos diez años, desde el año 2006. Coincidentemente a lo largo de esa década, varios de sus familiares cercanos se han beneficiado con contratos en entidades gubernamentales, como lo demostró una investigación realizada por Nuestro Diario.
Los hijos
El hijo varón del magistrado, Roberto Molina Spillari, es quien más contratos ha obtenido con el Estado. Según el portal de Guatecompras, el joven de 34 años ha recibido 652 mil 896 quetzales en adjudicaciones del Estado, desde el año 2010.
Aquí la tabla que indica los montos devengados:
La contratación de Roberto Molina Spillari en la Confederación Deportiva Autónoma de Guatemala, donde labora, coincide con la resolución emitida por la CC en diciembre de 2015, a favor de la reelección de los directivos en esa entidad deportiva.
Otra hija de Molina Barreto, Myrna Lucrecia Molina Spillari, laboró en 2009 para la Secretaría Contra la Violencia Sexual y Trata de Personas, con un salario de 30 mil quetzales al mes.
La hija menor del magistrado, Paula Molina Spillari, también obtuvo una buena ubicación en el Organismo Judicial (OJ), donde se desempeña desde abril de 2010. Actualmente, trabaja en la Unidad de Capacitación Institucional de la Corte Suprema de Justicia. Según informes solicitados por Información Pública al departamento de recursos humanos del OJ, el desempeño de Paula Molina Spillari ha sido calificado en las evaluaciones institucionales con alrededor de 70 puntos, lo que la acredita como una colaboradora "regular".
Paula Molina Spillari, quien destacó en el medio artístico nacional y está casada con un popular cantante, ha enfrentado varias sanciones disciplinarias. En el año 2015, se le suspendió en dos ocasiones: por cinco y diez días, sin goce de salario.
Ya antes, en el año 2010, Paulina Molina había enfrentado una situación similar, sólo que en esa oportunidad fue suspendida por tres días.
El yerno
Uno de los hijos políticos de Molina Barreto también se ha visto favorecido en las posiciones que ha ocupado en insituciones gubernamentales, mientras su suegro ha ejercido como magistrado titular en la CC.
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Julio Roberto Espigares López, casado con otra hija de Molina Barreto, Mónica Molina Spillari, trabajaba como Jefe de Servicios Generales del Ministerio Público (MP) y en diciembre de 2012 fue destituido y procesado penalmente, a raíz de una denuncia de intento de cobro de sobornos a proveedores de la entidad. La demanda fue desestimada pero Espigares López no se quedó sin empleo.
Del MP pasó al Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS). El portal Guatecompras muestra que tenía un contrato de prestación de servicios técnico profesionales, para la Gerencia de Planificación y Desarrollo. Ganaba 17 mil quetzales al mes y recibió en 2015 95 mil 679 quetzales hasta mayo de 2015.
