La FIFA solicitó a la justicia estadounidense recuperar "decenas de millones de dólares" de sus antiguos directivos perseguidos en los Estados Unidos, acusados de haber malversado más de 200 millones de dólares, según documentos publicados este miércoles.
Además, se revelaron cantidades que habrían recibido exmiembros del anterior Comité Ejecutivo de FIFA, incluido el dirigente guatemalteco, Rafael Salguero, acusado de haber recibido 5 millones de dólares para votar a favor de Sudáfrica para que fuera la sede del Mundial 2010.
Inmersa en el peor escándalo de corrupción de su historia, la FIFA se basa en la investigación estadounidense para también acusar a Sudáfrica de haber pagado 10 millones de dólares en sobornos, incluyendo al polémico dirigente Jack Warner, para la obtención del Mundial 2010.
"A Rafael Salguero se le reclaman más de 5.13 millones de dólares", detalla la acusación. Salguero es uno de los tres exdirigentes guatemaltecos involucrados en acusaciones de corrupción. Brayan Jiménez y Héctor Trujillo, ya están ligados a proceso en Estados Unidos y están en libertad bajo fianza.
Según el acta de acusación de la justicia estadounidense, los 39 antiguos directivos del fútbol mundial fueron acusados de haber malversado "más de 190 millones de dólares".
Hasta hoy "más de 100 millones han sido identificados, recuperados o congelados en los Estados Unidos y en el extranjero", precisó el acta de acusación.
Entre los cerebros de esta vasta red de corrupción figuran el trinitense Jack Warner, antiguo presidente de la Confederación de América del Norte y Caribe (Concacaf) y exvicepresidente de la FIFA, así como Jeffrey Webb, originario de las Islas Caimán, antiguo presidente de la Concacaf y también exvicepresidente de la FIFA.
Arrestado en Zúrich, Webb fue extraditado a los Estados Unidos mientras que Warner está sujeto a una solicitud de extradición de la justicia estadounidense.
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Sobre la base de la investigación estadounidense, la FIFA acusa a Warner y a Chuck Blazer, antiguo secretario general de la Concacaf, de ser los beneficiarios de una operación de compra de votos para la atribución del Mundial 2010 a Sudáfrica.