Una joven de 19 años sufrió un grave accidente cuando jugaba con sus hermanas. La mano derecha le quedó destruida. Sin embargo, médicos del Hospital de Amatitlán le dieron esperanzas, luego que lograran reconstruirla a través de una cirugía.
La menor es originaria de San Marcos, pero vivía en la ciudad capital cuando sufrió una descarga eléctrica mientras jugaba con sus hermanas más pequeñas.
Fue trasladada de emergencia hacia el Hospital de Amatitlán en junio pasado.
Según el encargado del Área de Quemados de ese centro asistencial, a su llegada la joven presentaba entrada y salida en ambos miembros superiores, contracturas en los dedos por la quemadura eléctrica y en el segundo dedo de la mano izquierda tenía necrosis (muerte de tejidos), por lo que le fue amputado.
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El 14 de enero, los médicos del Hospital realizaron una microcirugía reconstructiva, con el apoyo del profesional mexicano Mario Mendoza Muñoz, la cual duró poco más de ocho horas y con la que lograron mejorar las actitudes articulares, la movilidad y la fuerza muscular, con la que la joven podrá tener una mayor independencia.
También recibirá terapias que le permitirán reactivar los movimientos de su mano derecha.
Por otro lado, la joven será sometida a una nueva cirugía para reconstruir el antebrazo y continuar con su mano izquierda.
En la cirugía participaron los médicos del Hospital de Amatitlán Luis Carlos Urzúa, Karina García, como anestesióloga y las enfermeras Doris Aragón y Olga Barillas, a quienes las autoridades del Ministerio de Salud agradecieron por su labor.
También indicaron que la cirugía está valorada en 250 mil quetzales, que fue cubierto por el Estado.
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