El árbitro guatemalteco fue el encargado de dirigir el partido entre Estados Unidos y Trinidad & Tobago.
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Durante la noche del lunes 20 de noviembre, las selecciones de Estados Unidos y Trinidad & Tobago disputaron el partido de vuelta de los cuartos de final en la Liga de Naciones Concacaf 23-24.
El encargado de mantener el orden en el encuentro fue el experimentado árbitro guatemalteco Walter López Castellanos, quien ha mostrado su temple y calidad en los partidos internacionales.
Al minuto 38' de la primera mitad, el defensa estadounidense Sergiño Dest, exjugador del FC Barcelona, pateó el balón a la tribuna del estadio para demostrar el rechazo a una decisión arbitral.
Esta acción le costó su primera tarjeta amarilla y en ese momento Dest comenzó a reclamarle al guatemalteco sobre una supuesta falta que se cometió unos minutos antes y que no se marcó.
Walter López intentó explicarle la situación al defensor sin embargo este se alejó y le lanzó un beso, a lo que el comentarista del encuentro dijo, "Si el árbitro no lo expulsa, no puede dirigir nunca más".
Los compañeros de Sergiño, al darse cuenta de lo que había hecho, intentaron alejarlo de la escena y le pedían que se calmara, pero era muy tarde, el árbitro nacional ya había decidido expulsarlo.
"Muy bien Walter López", dijo el comentarista del partido al momento en el que el guatemalteco le muestra la segunda amarilla y la tarjeta roja a Sergiño Dest, que no paraba de reclamarle al colegiado.
El actual defensa del PSV Eindhoven se retiró del campo furioso, mientras sus demás compañeros le reclamaban por haber realizado tal "tontería", perjudicando al equipo de manera innecesaria.