Dairyn Cristal Cotón y Geraldin del Cid siguen siendo las mejores amigas. Sus rostros se hicieron populares en la prensa y en redes sociales tras escandalizar al país por lanzarle cal a la entonces vicepresidenta Roxana Baldetti, luego de la entrega del segundo informe de Gobierno el 14 de enero de 2014.
Ambas acusadas eran amigas antes del suceso, permanecieron juntas en prisión, y al recobrar la libertad, siguen compartiendo sus vidas.
Dairyn, la joven recordada por su cabello teñido de rojo, en una breve entrevista con Soy502 opinó sobre la situación de la exvicepresidenta que está encarcelada y acusada de corrupción: “No es correcto lo que hice porque es la autoridad. Pero al final, todos tenemos lo que merecemos y sería justo que recibiera su castigo”, expresó.
Las jóvenes tratan de recuperar su vida productiva. Una de ellas trabaja para mantener a su hija y la otra termina sus estudios.
Dairyn tiene 21 años, ha tenido algunas dificultades para mantener un empleo estable debido a que tiene antecedentes penales y policíacos por haber sido sentenciada en un procedimiento abreviado. Desde que salió de prisión, ha tenido cinco trabajos.
De Geraldin solo se sabe que siguió estudiando y ahora es alumna de diversificado.
Al recordar el suceso, Dairyn cambia su semblante serio y dice que “nos reímos mucho”.
El caso se conoce como el “harinazo”, porque al inicio se pensó que el polvo blanco lanzado contra Baldetti era harina. Sin embargo, el Instituto Nacional de Ciencias Forenses de Guatemala (Inacif), determinó que se trató de cal.
En el juicio, se confirmó que las dos jóvenes aceptaron lanzar la sustancia a la entonces vicepresidenta porque les ofrecieron un pago a cambio, aunque ambas han dicho que al final no recibieron el dinero.
Este es un video donde quedó registrado el suceso:
Karlos de León, el exdirigente estudiantil relacionado con el partido político Libertad Democrática Renovada (Líder), tiene vigente una orden de captura en su contra. Según el testimonio ofrecido al Ministerio Público (MP), él fue quien entregó las invitaciones a Dairyn y Geraldin: “siempre se hacía campaña negra con volantes en contra de la UNE y de Arzú”, relata.
Dairyn recuerda que el lugar que ocupa la exvicepresidenta en la cárcel Santa Teresa era justo el espacio donde ella acudía a cita con un psicólogo en el tiempo que estuvo en prisión. El detalle de la celda lo conoció a través de la prensa.