En ocasiones, el objetivo del maquillaje se tergiversa y en lugar de ser conocido como una herramienta para destacar atributos positivos, se ve mal.
Incluso, algunos llegan a opinar que el maquillarse es superficial y es signo de falsedad, pero sin duda no es así.
Si eres una de las personas que cree que el pinta labios es malo, debes conocer este estudio que la Universidad de Harvard y la Universidad de Chieti en Italia hicieron.
Aunque no lo creas, la investigación reveló que el maquillaje, además de hacer sentir más bonitas a las personas, hace que el cerebro asimile mejor el aprendizaje ¿cómo?
Tener una mejor autoestima dispone al cerebro a absorber un nivel de aprendizaje mayor, aumentando la concentración y la memoria.
Esto se llama efecto lipstick y tiene mucho sentido.
Los investigadores de Harvard y de Chieti hicieron un experimento social para ver concretamente qué efectos hacía el maquillaje más allá de lo estético en las mujeres, quienes fueron divididas en grupos de tres:
Al primer grupo lo hicieron maquillarse, al segundo escuchar música positiva e inspiradora y al tercer grupo lo hicieron dibujar sobre papel.
Luego, las hicieron tomar una prueba de alternativas que tenían que obtener ciertos resultados mediante unos textos proporcionados.
Las respuestas fueron reveladoras: el grupo con las calificaciones considerablemente más altas fue el de las mujeres maquilladas.
Los expertos dijeron que las mujeres maquilladas habían estado más dispuestas a aprender porque se sentían más seguras de sí mismas y ello incidió específicamente en el desarrollo de sus capacidades de aprendizaje, aumentando su inteligencia para sobrepasar la prueba.
Este estudio desmentiría el mito de que las mujeres más preocupadas de su estética son más superficiales y por ello menos inteligentes.
Eso sí, no se trata de establecer que las mujeres deben usar maquillaje para ser inteligentes y seguras de sí mismas.
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