Ben Affleck habría abandonado la mansión que comparte con JLo, tan solo un mes después de haber celebrado su segunda boda.
EN CONTEXTO: ¿Al borde del divorcio? JLo y Ben Affleck estarían atravesando su primera crisis
La segunda boda de Jennifer López y Ben Affleck llamó la atención de medios internacionales por lo extenso de la celebración, pues duró tres días y contó con más invitados que la primera.
Y aunque ha pasado solo un mes desde su especial evento, la pareja ya inició con problemas maritales que podrían llevarlos a separarse.
Ahora, se ha revelado que Jlo y Ben habrían tenido una fuerte discusión al punto de que el actor abandonara su residencia.
Recientemente, una fuente cercana a la pareja contó al medio Heatworld que los actores comenzaron a tener problemas, a raíz del repentino cambio de humor de Ben.
Dicha situación ha generado peleas constantes entre ambos, haciendo que JLo sienta temor de que su matrimonio acabe rápido.
El motivo de su discusión
El detonante que causó el enfrentamiento verbal entre ambos habría sido a raíz del miedo que JLo tiene sobre la etapa desenfrenada que el actor tuvo años atrás.
La diva del Bronx no quiere que Ben vuelva a sus comportamientos anteriores, como salir de fiesta seguido o su gran gusto por los juegos de azar.
De ahí que los recién casados hayan discutido fuertemente, y Ben tomara la decisión de irse de la mansión que comparte con la cantante.
"La pareja no deja de pelearse. Antes de la boda, Jennifer hizo una actuación digna de un Oscar, fingiendo ser perfecta y muy relajada. Ben estaba cegado por el amor pero no se dio cuenta en qué se estaba metiendo", dijo una fuente cercana al medio Radar Online.
No quiere separarse
Pese a la crisis que atraviesan, Jennifer López se niega a divorciarse y está haciendo lo posible porque su relación marche bien.
"Ella no quiere divorciarse después de solo unas semanas de matrimonio, y es consciente de que eso es lo que gente dice", expresó.
Sin embargo, de no resolver los conflictos que ahora los rodean, esta ruptura podría ser, ahora sí, una decisión definitiva.
