La bancada Cabal, partido que impulsó a Edmond Mulet a la presidencia, está dividido y aún no han asumido los cargos como diputados.
EN CONTEXTO: El Plan B de Semilla para la Junta Directiva del Congreso
El rompimiento de la bancada Cabal quedó al descubierto, durante las negociaciones de la Junta Directiva del Congreso, ya que de tener 18 diputados, esta agrupación únicamente garantizó 11 votos para elegir la planilla del nuevo partido de Gobierno.
Fuentes internas al partido revelaron que la división inició cuando se estaba decidiendo quién sería el Jefe de la Bancada y todo fue por las pretensiones de Carlos López Maldonado, hijo de Carlos López Girón, quien se postuló con la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), tras haber estado en una larga disputa legal señalado de Plazas Fantasma en el Congreso, pero un Juez los benefició.
Según detallaron, López le pidió a Mulet la dirección de la bancada, argumentando que a él le correspondía por la experiencia que ya tenía en el Legislativo.
A pesar de su insistencia, recibió un rotundo no por parte del excandidato presidencial. Hecho que no le gustó, por lo que decidió alejarse de las decisiones partidarias.
Con él, tomó camino Julio César López, hijo de Julio López Villatoro, hermano de Roberto López, más conocido como el "Rey del Tenis".
Junto con ellos se marcharon de las decisiones políticas dentro del partido, dos diputados de Retalhuleu y otros más que se les han ido sumando.
Al final, de los 18 diputados que ingresaron en bloque, 11 estarían trabajando en conjunto con Mulet y el resto con Carlos y Julio, ambos López, con quienes armaron una pequeña bancada de Cabal y que estaría negociando con los aliados al partido Vamos y Valor, dirigido ahora por Sandra Jovel.