A pesar de ser un año complejo por el evento electoral, el Banco de Guatemala califica de positivo el crecimiento económico de este 2023, pese a ser inferior al registrado en el 2022.
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Según las autoridades del Banco de Guatemala (Banguat), el país cierra el 2023 con un crecimiento del 3.5% del Producto Interno Bruto (PIB), lo cual considera positivo, pese a las condiciones políticas complejas propias de un año electoral.
Aunque el Banguat califica de positivo el cierre, este es inferior al crecimiento registrado en el 2022, que fue de 4.2% del PIB.
Este "ritmo que es cercano a su tasa potencial y que está por encima del promedio de la región Latinoamericana", explicó Álvaro González Ricci, presidente del Banco de Guatemala.
Razones del crecimiento
González Ricci argumentó que este crecimiento se da a pesar de un entorno complejo y clima de incertidumbre que la política interna ha impactado en los espacios económicos por "el aumento de la demanda interna, expresado por el consumo privado y la inversión, lo que se puede traducir como favorable para la economía guatemalteca", explicó el funcionario.
Expectativas para el año 2024
El Banco de Guatemala prevé que el próximo año la economía resistirá los cambios que se puedan dar y será sostenible, de modo que es posible que se pueda alcanzar un crecimiento de entre 2.5% y 4.5% en un eje central de 3.5%, es decir, manteniendo el porcentaje con el que se cierra el presente año.
¿Qué pasará si el presupuesto 2024 entra en vigencia?
Para González, aunque el presupuesto, aprobado el 15 de diciembre y suspendido de forma provisional por la Corte de Constitucionalidad este lunes 18 de diciembre, en cuanto a su funcionamiento e inversión es mayor al contemplado en el Proyecto de Presupuesto presentado por el Ministerio de Finanzas Públicas, se estima que el déficit fiscal como porcentaje del PIB pasó de 1.7% a 2.0% para 2024.
Este aumento es el resultado de la "recomposición de los egresos, como el traslado de Q2,000.0 millones que originalmente estaban orientados a la amortización de deuda interna y que finalmente fueron destinados para gasto de funcionamiento e inversión del siguiente año".
Con estas adecuaciones, el gasto previsto para el 2024 en funcionamiento del Estado aumentó alrededor de Q1,587.4 millones y el de inversión es de Q412.6 millones, siempre para el próximo año.