Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, aseguró que ya presentó su declaración de bienes ante la Secretaría de la Función Pública (SFP) y no tiene ni automóvil ni tarjetas ni crédito ni bienes inmuebles.
El presidente mexicano, quien advirtió la víspera a todos los miembros de su gabinete que tienen que presentar su declaración o no podrán seguir participando en su proyecto, explicó las circunstancias en las que posee la única propiedad que le podrían señalar: “La Chingada”.
Qué es “La Chingada”
Es una quinta, popularmente conocida como "La Chingada", que utiliza como residencia de descanso pero que está a nombre de sus cuatro hijos. "No es un rancho… porque rancho y finca están a un paso de ser hacienda, entonces no soy hacendado. Como decía Zapata, no fui a la revolución para hacerme hacendado".
La finca se popularizó en la campaña presidencial de López Obrador, cuando declaró que si no ganaba "se iba a ir a La Chingada", comentario que desató comentarios de propios y extraños a su causa.
202 pesos en la billetera
AMLO explicó: "No tengo cuentas de cheques, no tengo tarjeta de crédito, pero no de ahora… los bancos tienen antecedentes, tengo mucho tiempo sin tener tarjeta de crédito", agregó al tiempo de mostrar a los reporteros el contenido de su cartera con un billete de $200 pesos y otro de $2 dólares.
Sobre la casa en la que vive en la Ciudad de México, López Obrador declaró que está a nombre de su esposa Beatriz González, al igual que los vehículos, por lo que él no tiene posesiones legalmente.
“Chairos vs Fifís”
AMLO ha sido declarado como el presidente de los "chairos" y no de los fifís, es decir, de los pobres y no de los pudientes.
¿Quiénes son unos y otros?
Según el diccionario Santillana, fifí es “persona con un refinamiento amanerado y ridículo. Señorito, joven ocioso de familia rica. Petimetre”. En el discurso de AMLO, "los fifí" representan a personas ricas con piel muy delgada, muy delicadas y no dispuestas a escuchar la crítica."Fifi" se usa para todo: empresarios, políticos, ciudadanos, y por supuesto, la prensa.
Los Chairos, por su parte, y según Elena Goicoechea, investigadora del Colegio de México (COLMEX), y colaboradora de la revista Mira, es un fanático por definición, discípulo de Marx, amante de Castro, aspirante a la subvención, romántico de la pobreza, indigente intelectual, desconfiado de la riqueza, envidioso del triunfador, exhibicionista de su ignorancia, necesitado de domador, menor de edad crónico, resentido perenne, conquistado de corazón.
AQUÍ SUS DECLARACIONES:
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