Unos 7,8 millones de personas están en riesgo de caer en inseguridad alimentaria en América Latina y el Caribe, debido a la inflación y poco crecimiento económico.
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Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la inseguridad alimentaria significa que las personas podría no acceder "a alimentos suficientes, saludables y nutritivos que satisfagan sus necesidades energéticas diarias y gustos alimentarios para llevar una vida activa y sana". Los 7,8 millones se suman a la cifra ya conocida de 86,4 millones de personas en esta situación en la región.
"Esto es solo tomando en cuenta inflación. Si se le suma que golpea mucho más a las mujeres (en referencia a la pérdida de ingresos y empleo de las mujeres por la pandemia), a los trabajadores informales, a que no hay recursos para mejorar en lo social, (entonces) el impacto de la situación puede ser todavía mayor”, dijo el secretario general interino de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), Mario Cimoli.
La pobreza pasaría de 29,8% en 2018 a 33,7% en 2022 y en el caso de la pobreza extrema el aumento sería de 10,4% en 2018 a 14,9% este año, con énfasis en México, Colombia, Brasil y Paraguay.
La Cepal presentó este lunes en Santiago su informe "Repercusiones en América Latina y el Caribe de la guerra en Ucrania: ¿cómo enfrentar esta nueva crisis?", en el que también actualiza datos sobre pobreza y pobreza extrema en la región tras el surgimiento de este conflicto luego de la pandemia de coronavirus.
Cadena de eventos desafortunados
Cimoli indicó que "lo que está pasando ahora es un proceso de distintos 'shocks', crisis tras crisis y un proceso acumulativo" que comenzó con la debacle financiera mundial de 2008, siguió con las tensiones políticas entre Estados Unidos y China en 2019, la pandemia del coronavirus a partir de 2020 y actualmente, la guerra en Ucrania.
Menos ingresos y precios más altos
La región América Latina y el Caribe creció 6,3% en 2021, en plena recuperación económica de la pandemia. La proyección cae para 2022 a 1,8%, 0,3 puntos porcentuales menos que lo previsto en enero pasado, y "tiende a regresar al lento patrón de crecimiento de 2014-2019", señala el informe.
"Hay una respuesta heterogénea (de los países) con una tendencia muy fuerte a la baja de las estimaciones", sostuvo el secretario interino.
El Caribe destaca con una proyección de 10,1% de aumento del PIB impulsado por Guyana (13%) y Santa Lucía (10,5%). El crecimiento de Centroamérica se estima en 4,2%. En el caso de América del Sur, la cifra es de 1,5%, con Venezuela (5%) y Colombia (4,8%) a la cabeza.
La inflación regional, que sigue la tendencia mundial, pasará de 6,6% en 2021 a 8,1% en 2022, señala el informe.
El aumento de la pobreza "refleja el fuerte aumento de los precios de los alimentos", indica Cepal. "Estos niveles son notoriamente superiores a los observados antes de la pandemia e implican otro retroceso en la lucha contra la pobreza" en la región, agrega.