No fueron solo ocho, los 23 futbolistas de la Selección mexicana asistieron a una polémica fiesta en su día libre, el pasado 2 de junio, después de que el equipo venciera (1-0) a Escocia en el estadio Azteca.
El diario español El País publica este sábado una nota con información privilegiada en la que se asegura que la fiesta fue organizada por los tres capitanes del equipo Rafael Márquez, Andrés Guardado y Guillermo Ochoa, quienes consiguieron, a través de uno de sus representantes, alquilar una lujosa casa ubicada en Bosques de Las Lomas, una de las zonas más exclusivas de la capital mexicana.
El diario español asegura que pudo confirmar que todos los jugadores asistieron a la fiesta que tenía como fin unir al equipo y celebrar el cumpleaños de Javier "El Chicharito" Hernández.
A la entrada de la casa se le pidió a cada uno de los asistentes dejar a un lado sus teléfonos celulares. A la cita acudieron cerca de 80 personas, entre los futbolistas, amigas y amigos invitados y algunas celebridades.
La parranda empezó cerca de las 10 de la noche. “Estuvieron los 23. Salieron del estadio Azteca en camionetas y se fueron a la casa. Cenaron ahí. Sé que hubo mujeres”, comentó bajo condición de anonimato uno de los invitados de los futbolistas que asistieron al jolgorio.
Todo el escándalo inició cuando la revista mexicana TV Notas, dedicada principalmente a la publicación de famosos, publicó en su portada fotografías de Giovani Dos Santos y Guillermo Ochoa, asegurando que se trataba de una fiesta, "La verdadera despedida del Tri" la llamó, en la que incluso hubo prostitutas. Según esa publicación, también estuvieron Jonathan Dos Santos, Carlos Salcedo, Raúl Jiménez, Jesús Gallardo, Marco Fabián, Jesús Manuel Corona y Héctor Herrera.
La filtración de las fotografías habría sido responsabilidad de uno de los encargados de seguridad de uno de los futbolistas, aunque a algunos jugadores se les habría avisado para que no aparecieran.
*Con información de El País
