Es difícil dar seguimiento a las celebridades caídas en desgracia en los últimos tiempos.
El Hollywood de 2017 no es, para nada, el mismo de 2016. La gran protagonista de la galardonada serie “House of Cards” será Claire. Frank Underwood, uno de los antihéroes más famosos de tiempos recientes, ya ni siquiera aparecerá en la temporada final de la serie de Netflix. La cadena cortó toda relación “presente y futura” con Kevin Spacey por acosar sexualmente a otros actores y generar un ambiente tóxico de trabajo en el set.
¿Dos veces ganador del premio Oscar? No importa. Se le puede reemplazar. Y eso fue lo que hizo, precisamente, el director Ridley Scott. Grabó de nuevo todas las escenas de la película “All the Money in the World” en las que aparecía Spacey con el veterano actor Christopher Plummer. Esta semana Plummer recibió una nominación al Globo de Oro por su trabajo. La apuesta de Scott ya rindió frutos.
Los niveles de audiencia del “Today Show” de la cadena NBC suben como la espuma desde que el veterano presentador Matt Lauer fue despedido, de manera fulminante, también por agredir y acosar a algunas de sus compañeras de trabajo. ¿Dos décadas al aire? No importa. Hoda Kotb ocupa el espacio de Lauer desde el 29 de noviembre, y el programa (una mezcla de noticias y entretenimiento) suma todos los días más espectadores.
La revista “Time” concedió a las activistas del movimiento #MeToo (#YoTambién) el reconocimiento de “Persona del Año”. En la portada de esa edición aparecen la actriz Ashley Judd (una de las muchas intérpretes que alzaron su voz en contra del productor Harvey Weinstein, ya proscrito del mundo del entretenimiento) y la cantante Taylor Swift (quien demandó judicialmente a un DJ por manosearla durante un concierto). Junto a ellas Isabel Pascual, Susan Fowler, Adama Iwu y el hombro de una mujer que representa a todas las mujeres que deben permanecer en silencio por miedo a perder su trabajo.
Los políticos estadounidenses, a menos de que se llamen Donald y se apelliden Trump, no han estado inmunes. De Al Franken se decía que podía ser un contendiente a la presidencia de 2020 por el Partido Demócrata. Pero renunció a su escaño en el Senado luego de que ocho mujeres aseguraron que las había besado sin su consentimiento. El congresista John Conyers, de 88 años, adelantó su retiro por razones similares.
El martes los electores de Alabama propinaron el más duro revés que los republicanos han sufrido desde 2016. Roy Moore, juez estatal, acusado también de abuso sexual aunque esta vez por una mujer que en ese entonces era menor de edad, perdió el escaño en el Senado que dejó vacante el hoy Procurador General de la Nación, Jeff Sessions. De nada valió el decidido apoyo que le brindó Trump por todos los canales posibles.
Más temprano que tarde, las olas de este movimiento de mujeres empoderadas alcanzarán nuestras costas. Más temprano que tarde tomarán conciencia de que no está bien que el jefe las toquetee. Ni que es normal que alguien les saque besos a la fuerza, sobre todo si esa persona ejerce algún tipo de poder sobre ellas. Más temprano llegará el día del #YoTambién en Guatemala. Pero urge que sea más temprano que tarde.
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