Un hombre atacó a la jueza durante su juicio cuando ella leía sus delitos.
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En enero de 2024, Deobra Redden, de 31 años, atacó a la jueza que lo estaba a punto de sentenciar. Durante el juicio, al escuchar que sería condenado, saltó sobre el estrado y agredió a la jueza, lo que fue grabado y se viralizó.
Holthus le leía sus delitos, cuando afirmó que lo enviaría a prisión en vez de dejarlo bajo libertad condicional. Redden dio un impresionante salto sobre el estrado y cayó encima de la jueza, entonces de 62 años, a quien agredió antes de ser controlado por varios hombres en la sala.
Un alguacil resultó herido.
Durante la pelea un alguacil resultó herido; la jueza dictaminó una pena de entre 19 a 48 meses en prisión.
Pero la agresión le rindió cargos adicionales. Redden se declaró culpable y alegó que estaba mentalmente enfermo.
Su defensa abogó por una condena de hasta once años en un intento de encontrar un punto medio entre la gravedad de los cargos y las supuestas limitaciones que Redden enfrentaría por su salud mental.
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Las declaraciones de Redden
"No soy una mala persona, no soy un tipo malvado", dijo Redden a la jueza Susan Johnson, la ahora encargada del caso.
"No estoy justificando mis acciones, pero digo que no soy una mala persona, y sé que no intenté matar a Mary Kay Holthus, sé que me importaba su bienestar", agregó.
"Tomó la decisión consciente de matarme e hizo todo lo posible por conseguirlo", afirmó la jueza Johnson en el texto que Redden escuchó en lágrimas.
El examen psicológico que se le realizó al sentenciado concluyó que él entendía la diferencia entre bien y mal, y que el ataque no fue apenas contra Holthu: "Fue también un ataque contra el poder judicial".
Johnson lo sentenció a varias penas consecutivas por cada uno de los cargos pendientes, fallo que dejará a Redden tras las rejas por al menos 26 años, cuando podrá pedir libertad condicional.