La excandidata presidencial y exdiputada, Zury Ríos, reapareció en el Congreso para presentar una propuesta para restablecer la pena de muerte. Además del secuestro, la iniciativa promovida por la Asociación Hoy por Guatemala, que encabeza Ríos, pretende aplicar la pena capital a quienes hayan cometido sicariato.
Con el asesinato del abogado Francisco Palomo aún en la mente, su viuda Lucrecia de Palomo, respalda la propuesta de Zury Ríos con la que se castigaría a los asesinos a sueldo.
Zury Ríos acude al Congreso a socializar una iniciativa de ley para que se restablezca la pena de muerte. @soy_502 pic.twitter.com/uyu61KWY8m
— José Castañeda (@JoseCSoy502) febrero 9, 2016
“Ellos no paran, cada día hay más. De 2012 a la fecha tenemos a más de 23 mil personas que han sido ejecutadas por ellos y por eso nos debe preocupar a todos”, señala Lucrecia de Palomo.
Aunque 5 diputados fueron electos por VIVA, partido que postuló a Zury Ríos a la presidencia, ella dejó a esta agrupación política, por lo que no tiene votos seguros en el hemiciclo.
Según la propuesta de Zury Ríos, al sicariato también se le impondría la pena de muerte. @soy_502 pic.twitter.com/sQYNwdBpua
— José Castañeda (@JoseCSoy502) febrero 9, 2016
La exaspirante a la primera magistratura del país afirma que se estará reuniendo con todas las bancadas para intentar que esta propuesta se convierta en realidad. “Ahora que la bancada del presidente Morales está creciendo, que mayor razón que con todos sus votos y de los partidos que apoyen la justicia aprueben esta iniciativa de ley”.

La última ocasión en que se aplicó la pena de muerte en Guatemala fue en el año 2000. Aunque esta sigue vigente no se ha ejecutado a ningún otro condenado a muerte por la existencia de un vacío legal en torno a la facultad de otorgar indultos.
En 2012, la Corte Suprema de Justicia (CSJ) revocó la pena de muerte dictada contra 53 reos, al considerar que se violó su derecho de defensa, y les impuso una pena de 50 años de cárcel.
Por otro lado, Guatemala firmó el Pacto de San José, ante la Convención Americana sobre Derechos Humanos, el cual busca eliminar la pena de muerte de la legislación.