Siete terroristas murieron en los ataques que dejaron un balance provisional de al menos 129 muertos y 352 heridos en la capital francesa, y uno de ellos tenía pasaporte sirio, anunció el fiscal de París este sábado.
El fiscal François Molins precisó que el sirio "no era conocido" por los servicios de seguridad del Estado. Además, precisó que los autores de los atentados actuaron "muy probablemente en tres equipos".
Molins hizo un relato cronológico de los seis atentados que comenzaron con la explosión de un primer kamikaze cerca del Estadio de Francia y que concluyó pasada la medianoche con el asalto de las fuerzas del orden a la sala de espectáculos del Bataclán de la capital francesa, tras una toma de rehenes que dejó 89 muertos, perpetrada por tres individuos, dos de los cuales activaron sus cinturones de explosivos.
Los extremistas actuaron en tres grupos y utilizaron para su acción al menos dos automóviles de color negro, un Seat y un VW Polo, este último con matrícula belga.
El Polo había sido rentado en Bélgica por un francés que fue interpelado el sábado por las autoridades belgas junto a otras dos personas, todos residentes en Bélgica y desconocidos de los servicios antiterroristas franceses.
Según el fiscal, los atacantes evocaron la situación en Siria e Irak en sus diálogos con los rehenes del Bataclán y usaron en su mortífero operativo fusiles de guerra Kalashnikov y explosivos de peróxido de nitrógeno en sus chalecos.
Uno de los atacantes fue "formalmente identificado" gracias a las huellas digitales de un dedo seccionado por la explosión autoinfligida.
Se trata de un sujeto de nacionalidad francesa, nacido en 1985 en el departamento de Essonne, cerca de París, condenado en ocho oportunidades por delitos menores, aunque nunca había cumplido penas de cárcel. En 2010 había sido fichado como "radicalizado" por los servicios de inteligencia.
El fiscal confirmó que otro de los terroristas poseía un pasaporte sirio con año de nacimiento en 1990.
Las autoridades griegas habían indicado horas antes que el pasaporte correspondía al de un migrante sirio llegado el mes pasado a una isla griega, donde se inscribió como candidato a estatuto de refugiado.
"Confirmamos que el propietario del pasaporte llegó a la isla de Leros el 3 de octubre y fue registrado bajo reglas europeas", indicó el comunicado del ministro para la protección ciudadana, Nikos Toskas.