La principal función de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) es recaudar los impuestos de los guatemaltecos alcanzando metas programadas anualmente, pero ¿qué hacer cuando pareciera que los mecanismos que posee son obsoletos y no impulsan un crecimiento en los ingresos del Estado?
A criterio de Carlos Muñoz, superintendente de la SAT, la respuesta para incrementar la captación de recursos es contratar una empresa extranjera para que sea la responsable de “mejorar la recaudación del país” y por ello se le pagaría una considerable “comisión” que podría llegar hasta de un 30%.
Muñoz justifica y defiende la contratación, la cual aún se encuentra en una etapa inicial pues no están concluidas las bases de la licitación internacional, pues considera que significaría recursos frescos que el Estado no tiene y que necesita.
El jefe de la SAT remarcó que esto no se hace debido a que la Administración Tributaria esté recaudando menos; al contrario, explicó, se recaudaron 20 mil 214.4 millones al 31 de mayo pasado (4.4% superior a lo captado en el mismo periodo del año pasado). Sin embargo, reconoció que la meta no se cumplió por 604.5 millones y es por eso que desean "mejorar la recaudación".
Pago por resultados
Sin embargo, Muñoz recalca que pagará por resultados y no por trabajo efectuado, es decir, que si la empresa logra que las metas de recaudación se incrementen por encima de lo previsto, sobre esa suma adicional se le pagará la comisión acordada.
Mario Riverio, gerente de Planificación, lo explica mejor. Basándose en cifras hipotéticas el cálculo será en proporción al crecimiento en la recaudación de 2013 para aplicarse en el ejercicio fiscal de 2015.
“Supongamos que la empresa que realice el servicio se exceda un 2% sobre lo establecido como base; serían alrededor de 900 millones de quetzales. Sería a esa cifra la que se le asocia cualquier porcentaje de comisión negociada que va desde un 0.01% hasta el 30% de un potencial pago”, indica Riveiro.
En cifras concretas, si la empresa contratada se excede un 5%, se le pagarían alrededor de 46 millones de quetzales; si fuese un 10% serían 92 millones, si fueran 15% serían 130 millones; y si fuese el rango máximo, serían 274 millones de quetzales. “Es un rango al que seguramente no vamos a llegar”, agregó.
Es decir que de los 900 millones de quetzales que esta empresa recaude de más, si se aplicara la comisión máxima, al Estado le quedarían 626 millones de quetzales, que según Riveiro el Estado no tiene y necesita.
Reingeniería costosa
Pagar 274 millones de quetzales por un proceso de reingeniería en la SAT, es un monto excesivamente elevado por un servicio del cual se ignora absolutamente todo, consideran algunos analistas al preguntarles sobre el tema.
Abelardo Medina, consultor del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (ICEFI), señaló de forma preliminar (pues trabajan un análisis sobre el tema), que la contratación pareciera ser completamente legal; sin embargo, carente de ética.
Medina cometa que la SAT utiliza el argumento que la recaudación no está cumpliendo las metas y es por eso que se hace urgente que se le pague a un ente “externo” para que proponga una reingeniería.
Uno de esos entes que pueden contratarse por un precio muchísimo menor, señala Medina, es el Centro Interamericano de Administraciones Tributarias (CIAT), de la cualformaparte la SAT y puede contratar asesores si estima deficiencias en su trabajo. “No vemos donde está la necesidad de contratar una empresa”, concluyó.
