El Centro de Control de Vuelos Espaciales (CCVE) de Rusia ha recuperado la comunicación con el carguero Progress M-27M lanzado hoy rumbo a la Estación Espacial Internacional (EEI), informó la agencia espacial rusa Roscosmos.
"Hay comunicación por radio, aunque se observan algunos problemas con el envío de datos telemétricos que están siendo resueltos por los especialistas de Roscosmos", señala un comunicado de la agencia espacial, citado por Interfax.
La comunicación con el carguero espacial se había perdido poco después de su lanzamiento esta mañana y después de que el cohete portador lo situara en una órbita errónea.
Mientras, una fuente del CCVE informó de que la Progress se encuentra en una órbita 38 kilómetros más elevada que lo previsto en su apogeo, tras ser mal situada allí por el cohete portador Soyuz-2.1A.
Aunque el mando conjunto de la Fuerzas Aéreas de Estados Unidos y Canadá confirmaron que el carguero ruso se encuentra en una órbita errónea, Roscosmos aseguró que "los parámetros de lanzamiento (de la nave) son correctos".
La Progress M-27M, que transporta cerca de 2.5 toneladas de suministros para la EEI, fue lanzada a las 07.10 GMT y, según el plan de vuelo, debería acoplarse a la plataforma orbital seis horas después de su despegue.
En su bodega, además de combustible, oxígeno, alimentos, equipos científicos y regalos para los tripulantes de la EEI, lleva una réplica de la bandera que los soldados soviéticos izaron sobre el Reichstag en mayo de 1945 cuando capturaron Berlín.
Con esa bandera de fondo, los tripulantes rusos la EEI, Antón Shkaplerov, Guennadi Padalka y Mijaíl Kornienko, tienen previsto felicitar por videoconferencia a sus compatriotas con motivo del 70º aniversario de la victoria sobre la Alemania nazi, que Rusia celebra el próximo 9 de mayo.
La actual tripulación de la plataforma orbital la completan la astronauta italiana Samantha Cristoforetti y los estadounidenses Terry Virts y Scott Kelly.
La Estación Espacial Internacional es un proyecto en el que participan 16 países y que tiene un costo estimado en 100,000 millones de dólares.
La plataforma, con tripulantes a bordo de manera continuada desde 2000, tiene una masa de cerca de 450 toneladas y orbita a una distancia de entre 335 y 460 kilómetros de la Tierra, con una velocidad de unos 27,000 kilómetros por hora.