El presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, reveló que su tarjeta de crédito "fue rechazada" en un restaurante durante su viaje a Nueva York el pasado mes de septiembre, y agregó que solo pudo pagar porque, "afortunadamente", su esposa Michelle Obama portaba la suya.
"Debería mencionar, por cierto, que fui a un restaurante en Nueva York cuando estaba allí para la Asamblea General de Naciones Unidas, y mi tarjeta de crédito fue rechazada", dijo Obama al concluir un acto en la Oficina de Protección Financiera del Consumidor.
Entre risas, el mandatario afirmó que el sistema probablemente rechazó la tarjeta "porque no la utilizo lo suficiente", así que pensaron que "había algún fraude de por medio".
"Incluso yo me veo afectado por esto", agregó el presidente, en referencia al problema de las tarjetas fraudulentas.
Obama indicó que, "afortunadamente, (su esposa) Michelle tenía la suya". "Estaba tratando de explicarle a la camarera que realmente he estado pagando mis facturas", agregó el mandatario.
El mandatario estadounidense firmó en la citada agencia federal una orden ejecutiva precisamente para reforzar las medidas de seguridad en las tarjetas de crédito a las que se transfieren fondos públicos, como ayudas a la Seguridad Social.
El fraude de tarjetas de crédito es un creciente motivo de preocupación en EE.UU., después de que recientemente dos cadenas de grandes almacenes como Home Depot y Target revelasen que habían sufrido robos de los datos de millones de clientes.