La decisión del presidente Otto Pérez de fijar un nuevo salario mínimo en cuatro municipios, podría acarrear una demanda contra el Estado al violar convenios internacionales.
El anuncio del mandatario es en realidad una rebaja al salario mínimo actual. “Lo están reduciendo en comparación al que está vigente”, opina Luis Linares, director ejecutivo de Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asies).
EL ANUNCIO: Ejecutivo crea nuevo salario mínimo en cuatro municipios del país
El mandatario dijo en conferencia de prensa que el nuevo salario mínimo focalizado entrará en vigencia en 2015.
Los lugares "beneficiados" son: San Agustín Acasaguastlán y Gustatoya en El Progreso, también Masagua, Escuintla y Estanzuela, en Zacapa.
Los empleos, aseguró, serán “formales” y se pagará al mes Q1 mil 500, que debe incluir prestaciones y seguro social.
En esas áreas, según un estudio realizado por el Ejecutivo, los salarios a penas sobrepasan los Q600, sin ninguna prestación.
Linares, considera que el Ejecutivo estaría violando el Convenio 131 de la OIT sobre la fijación de salarios, que estipula que los salarios mínimos no podrán reducirse.
Además, Linares explica que el capítulo laboral del Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos prohíbe modificar los salarios de forma que sirva para atraer inversiones, tal y como se está haciendo ahora.
El mandatario, en compañía del ministro de Trabajo, aseguró que el salario focalizado es exclusivamente para nuevas empresas que se dediquen a exportar y de la industria de la manufactura ligera.
Según Pérez, la decisión ayudaría a crear en un mediano plazo unos 100 mil puestos de trabajo.
Lo califican de "jugarreta"
El gremio de empleados que se aglutina en la Central General de Trabajadores (CGTG) se pronunció en contra de la decisión.
El secretario general adjunto de la CGCT, Victoriano Zacarías, expresó que “es una jugarreta, solo en la cabeza de él (el presidente) cabe pensar que las necesidades en esos lugares son menores”.