Si alguna vez enviaste algún mensaje, foto o video comprometedor por la aplicación de mensajería Snapchat, estos podrían estar circulando por Internet. Un grupo de hackers lograron obtener y publicar alrededor de 200 mil imágenes al vulnerar la base de datos de SnapSaved, una aplicación que permitía a los usuarios guardar las imágenes que se recibían en SnapChat, alimentando los temores sobre estos mensajes que deberían desaparecer segundos después de ser vistos.
Snapchat, creado por estudiantes de la Univeridad de Stanford, es muy popular desde su lanzamiento en septiembre de 2011. La aplicación para dispositivos móviles es uno de los servicios digitales más usados por adolescentes alrededor del planeta, permite a los usuarios mandar imágenes o videos y elegir el tiempo que desea que su mensaje sea visible -hasta 10 segundos- antes de que se autodestruya.
Lo que dio vida a servicios web como SnapSave y Snapsaved, que solicitan el nombre y contraseña del usuario de Snapchat para vincular el contenido de la cuenta y copiarlo.
Los 'hackers' comenzaron a poner en línea la noche del jueves copias de estos contenidos provenientes de la recopilación que hicieron durante años con Snapsaved, lo que le permitió a los piratas informáticos crear una biblioteca de uno 13 gigabytes, según el sitio especializado Business Insider.
Los archivos hackeados no solo contienen la imagen y video, sino que también reflejan datos con la fecha y nombre de usuario de los afectados.
Cerca de la mitad de los usuarios de Snapchat tienen al menos 17 años, lo que generó preocupación ante la posibilidad de que imágenes de carácter sexual de los jóvenes hayan sido publicadas en Internet, que podrían ser asociados a la pedofilia.
Snapchat aseguró el viernes en un comunicado que sus servidores no fueron pirateados ni sus aplicaciones tras la fuga de datos.
Los usuarios de Snapchat son "víctimas" del uso de aplicaciones externas para enviar o recibir "snaps", el uso de servicios como SnapSaved y SnapSave Android son ilegales y bajo el propio riesgo del usuario además de ser una práctica prohibida por la empresa con sede en California.
La compañía agregó que constantemente monitorean las tiendas de aplicación de iOS y Android en búsqueda de este tipo de aplicaciones ilegales para que sean retiradas.
