Con el propósito de dar a conocer los riesgos y cómo actuar ante los distintos escenarios que se podrían presentar al momento de emigrar de manera irregular, Cancillería y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) presentaron de manera oficial, la campaña "¿Qué pasa? ¿Qué hago?" durante una reunión con la patrulla fronteriza de Tucson, Arizona.
Una madrugada fría de enero de 2014, Juanito emprendió un viaje hacia Estados Unidos con la ilusión de encontrar un trabajo que le permitiera ayudar a su mamá quien resultó enferma luego de exponerse al calor del comal todos los días para proveer comida a él y sus 6 hermanos.
El viaje fue difícil; el hombre que por una elevada cantidad de dinero guiaba a Juanito lo abandonó en su recorrido, gracias a preguntas, el menor llegó varias semanas después al desierto de la frontera de Arizona, pero nadie le dijo que debía tomar algunas precauciones para evitar ser detenido por la patrulla fronteriza o peor aún, morir.
El adolescente fue encontrado por las autoridades norteamericanas que posteriormente lo llevaron a un albergue. El caso de Juanito, es uno de los miles que en 2014 llevaron a Estados Unidos a dar un grito de alerta ante una posible crisis por la elevada cifra de menores no acompañados que buscaban el sueño americano.
La situación referida fue lo que llevó a Unicef a apoyar a la Cancillería guatemalteca en la implementación de una campaña que informe a la población acerca de los peligros que pueden encontrar en su travesía.
El viceministro de Relaciones Exteriores, Óscar Padilla, explicó que la campaña que nació al implementarse en Quiché también contará con acordeones, videos y audios para que los consulados nacionales sepan cómo atender a los migrantes y para que los últimos sepan cuáles son sus derechos al momento de emprender el viaje.
El representante de Unicef, Justo Solórzano, presentó la iniciativa ante una delegación del Departamento de Aduanas y Protección Fronteriza de Tucson, Arizona, y de Washington, encabezados por Manuel Padilla Jr.
Los norteamericanos discutieron con los delegados de Unicef, Cancillería y la Pastoral de Movilidad Humana el avance y las medidas que se han integrado para reducir la migración, en el caso de Estados Unidos se dio a conocer que se aumentó la capacidad de las torres de rescate en el desierto de Arizona al colocarles una luz azul que puede ser percibida a una instancia de 10 millas.