El futuro de las negociaciones de paz para Colombia, que cumplen dos años el miércoles, debe definirse este martes luego de que la guerrilla de las FARC rompa silencio sobre el secuestro de un general.
Los negociadores de la guerrilla hablarán con la prensa en La Habana para pronunciarse sobre el secuestro del general Rubén Alzate, junto a un suboficial y una abogada, que se les atribuye por el presidente Juan Manuel Santos, quien suspendió las conversaciones de paz por este motivo.
Santos exigió el lunes a las FARC su pronta liberación como prueba de su voluntad de alcanzar la paz, en la peor crisis que vive el proceso.
"El compromiso de las FARC está puesto a prueba. De su decisión depende seguir avanzando hacia el fin del conflicto y la reconciliación", dijo el mandatario colombiano en cadena nacional.
El secuestro ha puesto en riesgo el proceso de paz en vísperas de que secumplan dos años de negociaciones, durante las cuales las FARC y el gobierno han consensuado tres de los seis puntos de una agenda destinada a acabar un conflicto armado de medio siglo, que ha dejado 220 mil muertos y 5.3 millonesde desplazados.
La delegación de las FARC en Cuba, encabezada por Iván Márquez, se limitó el lunes a publicar un 'tuit' diciendo a sus lectores "mantén pendiente", pero sin mencionar el caso de los tres secuestrados: el general, el cabo primero Jorge Rodríguez Contreras y la abogada Gloria Urrego, coordinadora de Proyectos Especiales de la Fuerza de Tarea que comandaba Alzate.
Desde principios de 2012, el grupo se comprometió a no secuestrar a más civiles, pero se reservó el derecho de capturar a policías o militares, a los que considera prisioneros de guerra.
Además de la Unión Europea, que este lunes llamó a una liberación "deinmediato y sin condiciones" de los rehenes, la oficina de la ONU en Colombia repudió los secuestros.
"Dado el notable progreso realizado por las partes en los diálogos de La Habana, y considerando la importancia de construir sobre estos logros para completar la agenda de paz, Naciones Unidas espera que la situación sea resuelta lo más pronto posible", indicó la oficina en un comunicado.
Las negociaciones de La Habana están en receso desde el 2 de noviembre y debían reanudarse este martes, pero Santos ordenó a su delegación permanecer en Colombia.
