La Aerolínea Malaysia Airlines se encuentra en el ojo del huracán ya que en menos de cuatro meses dos de sus aeronaves han caído, una en el océano Índico y la otra derribada en Ucrania; sin embargo, su debacle económica comenzó desde 2011, debido principalmente a la competencia que enfrenta con aerolíneas de bajo costo.
La revista Dinero publicó este lunes un análisis sobre las pérdidas y peripecias económicas que enfrenta Malaysia Airlines; una constante caída en sus ingresos registrados antes de que se convirtiera en el centro de las noticias por la caída de dos de sus aviones.
En 2013, la empresa tuvo una pérdida de 367 millones de dólares y durante el primer trimestre de este año, las cifras en rojo se acercaron a los 139 millones de dólares.
Ahmad Jauhari, presidente Ejecutivo de Malaysia Airlines Group, destacó que la primera mitad del año es más débil en comparación con las previstas para el segundo semestre, el cual es un periodo más aglutinado por las fiestas de fin de año.
Mejoría de la marca
La línea aérea se encontraba implementando un plan estratégico para mejorar la marca a nivel internacional y recuperar su antigua clientela. Sin embargo, cuando esta campaña ya había tomado impulso y se comenzaba olvidar el sucedo del vuelo MH370, el 17 de julio pasado el vuelo MH17 cayó entre Ucrania y Rusia, en el cual fallecieron 298 personas.
Supuestamente, el Boeing 777 fue derribado por un misil en medio de un conflicto que protagonizan los rusos y ucranianos.
Por este suceso, Malaysia Airlnes tendrá que pagar más de 50 millones de dólares para indemnizar a las familias de los pasajeros; a cada familia le corresponde un aproximado de 170 mil dólares. Amén de los nuevos clientes que ahora se perderán.
Expertos analizan que si la caída del primer avión sirvió como experiencia de cómo levantarse ante una crisis, frente a este nuevo percance el futuro para la compañía se torna difuso, ya que si desea evitar hundirse por completo su campaña para recuperar a su clientela deberá ser mucho más agresiva.