Los cazadores furtivos han matado en lo que va de año en Sudáfrica un total de 1,020 rinocerontes, dieciséis más que en todo 2013, según datos gubernamentales recogidos hoy por el diario The Citizen.
Solo entre el 11 de septiembre y ayer, murieron a manos de las mafias de tráfico de cuernos de rinoceronte 250 animales, la mayoría de ellos en el parque nacional Kruger, en el noreste del país, donde han sido abatidos 672 ejemplares.
"Desgraciadamente, la amenaza de la caza furtiva ha continuado creciendo", declaró en la presentación de las últimas estadísticas la ministra de Medio Ambiente, Edna Molewa.
Sudáfrica tiene, con cerca de 20,000 ejemplares, la mayor población de rinocerontes del mundo, que podría desaparecer en los próximos años si no se reduce el ritmo de la caza furtiva.
Según los expertos, los principales destinos del cuerno de rinoceronte son Vietnam y China, donde este producto -utilizado para elaborar pócimas- se asocia a propiedades curativas, rejuvenecedoras y afrodisíacas y al éxito social.