El dirigente opositor Leopoldo López quedó detenido y será juzgado por su presunta responsabilidad en los incidentes violentos del 12 de febrero pasado tras la decisión de un juzgado de Caracas de enviar el caso a juicio.
De ser sentenciado podría recibir una condena máxima de 10 años.
"La juez ratificó todas las peticiones del Ministerio Público, lamentablemente no se hizo justicia", indicó el partido Voluntad Popular, que lidera López, a través de la red social Twitter.
López está acusado por la Fiscalía en calidad de autor intelectual de incendio intencional, instigación pública, daños y asociación para delinquir por los hechos violentos del 12 de febrero.
Ese día, dos marchas una convocada por él y otra por estudiantes, se manifestaron de forma pacífica por el centro de Caracas, pero a su término un grupo de encapuchados atacó el edificio de la Fiscalía y varios vehículos de Policía en disturbios y enfrentamientos que ese día se cobraron tres muertos y decenas de heridos.
Esos incidentes supusieron el inicio de las protestas que durante semanas se repitieron en el país contra el Gobierno de Nicolás Maduro y que han dejado incidentes violentos con un saldo de 42 muertos y cientos de heridos y detenidos.