La elegancia y calidez de la cantante italiana Laura Pausini y la experiencia y carisma del argentino Fito Páez fueron los pilares fundamentales para que la segunda jornada del Festival Internacional de Viña del Mar, Chile, finalizara con éxito.
También ayudó en esta jornada el sorpresivo triunfo del actor y humorista Jorge Alis, que finalmente controló con su rutina al "monstruo" de la Quinta Vergara, sede del certamen, el apelativo que recibe el público, despiadado con aquello que no le gusta.
Más de 15.000 personas disfrutaron con temas como "Quiero decirte que te amo", "Amores extraños" y "Se fue", ésta última canción que acomodó con acordes de salsa.
La parte emotiva de su actuación corrió por cuenta de un dibujante de Chillan, en el sur de Chile, que viajó hasta la ciudad de Viña del Mar para entregarle un cuadro de grandes dimensiones en el que estaba dibujado el rostro de la italiana.
Más tarde Fito Paéz, uno de los grandes del rock argentino, enfundado en un brillante traje de color rosado, encantó al público con muchas de sus canciones que han sido éxitos en Latinoamérica.
La mayoría de los artistas que hasta ahora se han presentado en el festival han condenado los hechos que vive Venezuela, donde las protestas han dejado 13 muertos y decenas de heridos y detenidos.