El camino para elegir a un nuevo Superintendente de Administración Tributaria comienza a allanarse. Aunque el proceso para relevar a 4 integrantes del Directorio de la SAT inició en 2014, fue hasta este viernes que el presidente Jimmy Morales decidió cambiar por completo a quiénes fijan las políticas de la entidad recaudadora.
Los designados por el gobernante tendrán que definir una terna para elegir al próximo titular de la SAT, debido a que desde hace 10 meses la institución no cuenta con superintendente porque el último, Omar Franco, fue capturado porque el Ministerio Público y la CICIG lo vinculan con "La Línea".
El mandatario hizo la elección entre el listado que le envió la postuladora: María Elena Ávila, Jorge Dávila, Donato Monzón, Carlos Núñez y Francisco Zetina son los ungidos, algunos de ellos tienen experiencia en la SAT.
Ávila fue Intendente de Fiscalización, Monzón Gerente de Planificación y Dávila laboró como asesor encargado de capacitación.
Edgar Pape, uno de los exdirectivos suplentes que estuvo en la SAT durante más de una década, señala que el cambio de autoridades no resuelve los problemas al 100%. “Debe reformarse y aplicarse la Ley Orgánica de la SAT”, afirma Pape.
Rodrigo Montufar, exintegrante titular del Directorio, señala que ninguno de los directivos deseaba mantenerse en el cargo, porque los cambios a esta institución solo se pueden efectuar si se reforma la ley, por lo que acordaron poner a disposición los cargos.
“Cualquier persona que llegue, siempre va a tener el fenómeno que el Superintendente es nombrado por el presidente y eso debilita a la institución”, puntualiza Montufar.
Además de fijar las políticas que debe cumplir la institución, el directorio se encarga de revisar los recursos planteados por los contribuyentes por los hallazgos efectuados por la SAT.