El 2 de abril es la fecha más representativa para todos aquellos que tenemos un miembro autista en la familia. Nos vestimos o usamos algo que tenga color azul en señal de apoyo y solidaridad hacia la causa, esa que nos une para crear conciencia en un mundo donde uno de cada 68 niños nace con autismo.
Más que una situación de entendimiento y concientización, este año la ONU (http://www.un.org/en/events/autismday/2014/sgmessage.shtml) en el Día Mundial del Autismo propone un llamado a la acción, al respeto y la reinserción social de todos aquellos que poseen Trastornos del Espectro Autista (TEA). Es por ello que organizaciones como Autism Speaks (http://www.autismspeaks.org ) conmemoran este día con Light It Up Blue (www.lightitupblue.org) iluminando de color azul los monumentos más representativos de varias ciudades alrededor del mundo, con el propósito de lograr que nos unamos a la causa que afecta hoy a la población mundial sin exclusión de condición social, raza, sexo, origen geográfico o credo.
Cada 2 de abril escribo y dedico estas líneas en especial a mi sobrino, quien con su vida me ha enseñado y ayudado a entender los momentos críticos y fascinantes que pasan en la vida de un autista. Esta es una condición en la que ningún individuo es igual a otro y el diagnóstico de uno jamás podrá ser igual al de otro, pero que podemos involucrar a nuestro mundo habitual potencializando las cualidades y facultades o habilidades que cada uno de los niños autistas poseen. Hoy reafirmo mi responsabilidad por hacer valer los derechos de los niños autistas, quienes son sometidos a una variedad de etiquetas que en nuestro mundo “regular” hacen que nunca logren encajar por la falta de tolerancia y aceptación social en este lugar que compartimos en tiempo y espacio.
Estoy segura que mi vida no sería la misma si mi sobrino fuera un niño regular. Él no es una persona “enferma” o “extraña” -como suelen decirles equivocadamente-, simplemente es una persona diferente, que vive con otras características y condiciones neurológicas, afectivas y cognitivas. Daría lo que fuera por saber con precisión cuáles son éstas condiciones mientras pasan por su mente, esa mente que recita restas matemáticas constantemente en voz alta, que se concentra en ver cómo funciona una hélice y que dedica horas armando cuidadosamente pieza por pieza una gran estructura de Legos.
En días como hoy es necesario resaltar el tema, darles la importancia que merecen como personas. En la medida que gobiernos, sistemas de salud, educación y sociedad se involucren y les importe, entonces podrán invertir más en estudios, medicina, desarrollo o incluso en la prevención de este trastorno que con los años crece más en cifras mundiales.
Para conocer más acerca del autismo en Guatemala, existen fundaciones y asociaciones que brindan su apoyo al autista, tanto como a familiares y amigos para difundir información acerca del diagnóstico y tratar el trastorno:
-Fundación Autismo Guatemala (http://www.autismoguatemala.org/)
- Asociación Guatemalteca por el Autismo (http://www.autismoguate.org/)
- Asociación Voces del Autismo (http://www.vocesdelautismo.org/)
Involúcrate en el tema, haz un llamado a la acción. Si tú quieres unirte, puedes hacerlo siguiendo cualquiera de estas iniciativas:
1. Lleva contigo el prendedor o insignia en forma de rompecabezas Autism Speaks Puzzle y cuéntales a las personas que te pregunten acerca de este prendedor, la razón por la cual lo llevas puesto.
2. Cambia tu foto de perfil en las redes sociales con el logo de Light It Up Blue y etiqueta por lo menos a 10 personas para que conozcan acerca del tema.
3. Publica información relevante en blogs y sitios informativos acerca de cómo tú apoyas esta causa.
4. Vístete con tonos azules o usa algún accesorio (pulsera, listón, llavero) en color azul.
5. Inscríbete en las diversas actividades de apoyo, por ejemplo carreras deportivas.
La forma en que nos involucremos y conozcamos más acerca del autismo, hará que este tema deje de ser un tabú y podamos exigir más recursos sociales para evitar que este trastorno siga creciendo progresivamente.