Este guardameta hizo lo que todo futbolista sueña, no importa si es un delantero, un mediocampista, un defensa o el mandamás de la portería, todos han soñado con anotar un gol a último minuto y salvar el partido, pero en esta ocasión la realidad superó cualquier expectativa.
Se jugaba el minuto 93 de un encuentro de tercera división de España y el Club Deportivo Sariñena caía por 3-2. El árbitro marcó un tiro de esquina y el guardameta del Sariñena, Pedro Armañac, corrió hasta el área contraria para intentar anotar de cabeza, pero no pudo hacerlo, lo que pasó fue algo mucho mejor, pues tras una serie de remates el balón quedó suelto dentro del área y Armañac optó por anotar con un movimiento muy parecido al famoso "escorpión" del "loco" Higuita.
La algarabía se desató en las gradas y el portero ni siquiera pudo saber si había anotado o no, pues sus compañeros se le abalanzaron encima para celebrar el gol del empate que él había conseguido.