Integrantes de las FARC reconocieron ser responsables de la captura de un general y sus dos acompañantes en una zona rural de Colombia.
El general Rubén Alzate, el cabo Jorge Contreras Rodríguez y la abogada Gloria Urrego fueron interceptados el domingo por unidades rebeldes móviles, "en ejercicio de sus tareas de seguridad", en el departamento occidental de Chocó, indicó la guerrilla en un comunicado publicado en su página web y leído en La Habana por su delegación de paz.
Alzate es comandante de la Fuerza de Tarea Conjunta Titán que opera en esa empobrecida zona del país, es un militar de alto rango y fue capturado por las FARC en los 50 años del conflicto armado.
"Una vez identificados plenamente, pese a vestir ropas civiles, los tres fueron capturados por nuestras unidades, en razón a que se trata de personal militar enemigo, que se mueve en ejercicio de sus funciones, en área de operaciones de guerra", indicó la guerrilla.
Reconciliación
En una breve rueda de prensa en La Habana, el comandante Pablo Catatumbo, uno de los negociadores de las FARC, ofreció "generar los mecanismos de solución de este problema" y afirmó que se habría evitado si el presidente Juan Manuel Santos hubiese aceptado una tregua bilateral mientras se desarrollan las negociaciones de paz, que este miércoles cumplirán dos años.
Desde el inicio del proceso de paz, la guerrilla ha insistido en acordar una tregua bilateral, planteamiento que el gobierno rechaza por considerar que serviría a los rebeldes para fortalecerse militarmente.
"Hemos dicho que tenemos la disposición, esta delegación de paz, a contribuir a una pronta, sensata solución de este problema y que los diálogos deben continuar", declaró.
Pero a la vez pidió al gobierno aclarar "qué hacía este general, rompiendo todos los protocolos de seguridad", en esa remota zona donde opera la guerrilla, en referencia al hecho de que el general vestía de civil y se desplazaba sin escoltas.
Santos exigió el lunes a las FARC la pronta liberación de los rehenes como prueba de su voluntad de alcanzar la paz.
"El compromiso de las FARC está puesto a prueba. De su decisión depende seguir avanzando hacia el fin del conflicto y la reconciliación", dijo el mandatario colombiano.
El presidente aseguró además que mientras el general Alzate y sus compañeros estén cautivos, los negociadores de paz del gobierno no viajarán a La Habana, donde estaba previsto que este martes se iniciase un nuevo ciclo de conversaciones.