El que un diputado no sea reelecto no significa que se tenga que ir del Congreso. En total 86 políticos tuvieron que dejar su curul el 14 de enero, pero varios encontraron un segundo aire como asesores o en algún otro cargo dentro del Organismo Legislativo.
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El Secretario General y excandidato a la vicepresidencia por el Partido Patriota, Valentín Gramajo, aún ronda en los pasillos del Palacio Legislativo. Tras su fracaso electoral, Gramajo se encargará de asesorar a los 4 diputados, de los 18 electos, que aún están en la bancada naranja.
Hasta 2007 Carlos Mejía laboró como asistente de la bancada URNG, pero decidió congelar su plaza 011 durante los 8 años en que fue diputado. Ahora que dejó la curul, regresó a su antiguo puesto.
José Fernández Chenal y Aleksander Castillo fueron los operadores políticos del Partido Patriota durante los últimos cuatro años. En septiembre de 2015, ambos se separaron de esta agrupación política para integrar el “Bloque Independiente”, que luego se convirtió en la bancada del Movimiento Reformador. Los dos exdiputados asesorarán a este partido.
Carlos Herrera fue uno de los diputados más cercanos al expresidente del Congreso Luis Rabbé, quien supo recompensarlo. Herrera dirigirá el Instituto de Estudios Legislativos que fue autorizado en noviembre de 2015. El exparlamentario será el encargado de instruir a los nuevos diputados, por lo que podría contar con el apoyo de otros exdiputados.
Las plazas del Congreso también se convierten en premios de consolación. Algunos otros políticos que no lograron ganar un cargo de elección popular son ayudados por sus excompañeros de partido para asegurarse un ingreso mensual.
El excandidato a la presidencia de la URNG, Miguel Ángel Sandoval, ha laborado durante años como asesor de esa bancada y este año no es la excepción.
Ronaldo Robles fue Secretario de Comunicación Social de la Presidencia durante el Gobierno de Álvaro Colom y en 2015 ocupó la quinta casilla del Distrito Central por la UNE. Sin embargo, no obtuvo los votos necesarios para ganar la curul, aunque su participación política le ayudó para que el presidente del Congreso Mario Taracena lo contratara como su asesor.
El exministro de Gobernación, Carlos Menocal, será el Director de Comunicación Social del Congreso luego de haber sido designado para ocupar la octava casilla del Listado Nacional, durante la Asamblea General de la UNE. Sin embargo, no pudo inscribirse en el Tribunal Supremo Electoral por no contar con finiquito por varios reparos que la Contraloría General de Cuentas le hizo durante su administración en la cartera del interior.
Taracena reconoce que no tienen mayores controles para contratar a un asesor. “Hay personas que fueron diputados que tienen mucha experiencia y vale la pena aprovecharlos”, puntualiza Taracena.
