La relación entre Otto Pérez y el Tío Sam empezó mal.
Washington no se mostró amigable desde el día uno, cuando "se abstuvo" de enviar a un representante de peso a la toma de posesión de Otto Pérez Molina.
Las señales de las mal querencias han ido en aumento desde entonces y en los últimos días han llegado a ponerse francamente tensas.
El quiebre se produjo hace unos días, cuando el embajador Todd Robinson visitó una escuela en Izabal, cerca de Santo Tomás de Castilla.
Al ver las precarias condiciones de esa escuela, el diplomático ofreció unas declaraciones que pocas veces se oyen en boca de un embajador pero que muchos guatemaltecos sentimos como propias.
Indignado, como las 30 mil personas que se concentraron el 25 de abril en la Plaza de la Constitución de la capital, Robinson afirmó que la corrupción gubernamental es la culpable de que en nuestras escuelas no haya aulas ni pupitres.
No satisfecho con esas palabras lapidarias, el embajador advirtió que la sociedad había enviado una mensaje muy fuerte a sus dirigentes y que ojalá ellos lo hubieran comprendido.
Sin muchos miramientos, el aguerrido embajador le dijo “corruptos” a los gobernantes y les indicó que más les vale enderezar el rumbo o atenerse a las consecuencias.
Las revelaciones surgidas a raíz de la acusación planteada por el Ministerio Público y la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala, CICIG, han detonado un escándalo sin precedentes, en este país de escándalos rutinarios.
Nunca antes se había sorprendido a la cúpula del gobierno tan “con las manos en la masa”, cual capos de una mafia.
La corrupción, como bien dijo el embajador Robinson, deja a niños sin escuelas y sin medicinas. Personas han muerto por falta de servicios y esos crímenes no pueden ni deben quedar impunes.
Las declaraciones del embajador han venido acompañadas de una serie de rumores. Uno de los más insistentes señala que varios altos funcionarios de este gobierno podrían quedarse sin visa o ya la han perdido y aún no lo saben.
Fuentes allegadas a círculos diplomáticos señalan que habría ministros, viceministros, “cobradores” de ministros y diputados que podrían ver su visa revocada de manera inminente. Se habla incluso de que los titulares del Ejecutivo podrían perder el documento, desde ya o cuando dejen el cargo.
Eso sí, de forma oficial ningún funcionario de la Embajada se había pronunciado…hasta ayer.
En ese lenguaje sutil –y no tan sutil—de los diplomáticos, la Embajada ha dejado entrever que el retiro de visas es un tema que está sobre la mesa en Guatemala.
El consulado de la Embajada de los Estados Unidos dispone de una columna semanal en Nuestro Diario, donde esa oficina intenta responder a las dudas que aquejan a los guatemaltecos que quieren obtener el ansiado documento.
Ayer, inocentemente, esa columna entera, completita, trató de un tema que no es el meollo de la preocupación de los turistas y los migrantes: una larga explicación de las razones, motivos y circunstancias que hacen que una persona no sea “elegible” para conservar su visa o que obligan al Consulado a revocar la que posee.
Entre estas causas hay algunas muy pedestres, como que el titular de la visa recibió otra, de diferente tipo, y algunas que son más interesantes, como el haber cometido algún crimen (desde organizar una red de defraudación aduanera, pertenecer o ser cómplice de redes criminales, presionar jueces o pedir sobornos a empresas estadounidenses) o constituir un peligro para la seguridad pública o nacional de los Estados Unidos (andar en tratos con los carteles de la droga, por ejemplo).
Así, sin proponérselo necesariamente, un día antes de que se conociera la sentencia de la narcotraficante conocida como La Reina del Sur, Marllory Chacón, abreviada gracias a que la acusada colaboró con la justicia proporcionando información sobre sus "negocios", así nada más, el Consulado explicó en el periódico de mayor circulación del país, por qué cancela visas.
El que tenga oídos que oiga. Y el que tenga dudas, que se presente a la Embajada a ver si todavía es apto para darle la mano a Mickey Mouse.