Miles de guatemaltecos han vivido las últimas semanas un verdadero calvario por suprimir o reducir al mínimo su ingesta diaria el limón, debido a que este ha alcanzado un precio histórico sobrepasando los 2 quetzales por unidad.
Pese a que los meses de marzo y abril de cada año se caracterizan por una baja en la cosecha de limón, lo cual hace que el precio aumente, este año las circunstancias son diferentes, pues sumado a la baja producción del país, México y El Salvador poseen problemas en sus cosechas distorsionando el precio en el mercado.
México es el principal proveedor de limón de los Estados Unidos; sin embargo, debido a una plaga denominada “Dragón Amarillo” la producción cayó 40% y los compradores estadounidenses han volcado sus billeteras hacia Guatemala.

La demanda del limón es tan fuerte que Estados Unidos, México y El Salvador están comprando el producto nacional a precios exorbitantes; lo cual ha sido aprovechado por los productores locales quienes han desabastecido el mercado guatemalteco, reduciendo la oferta del producto y aumentando su precio.
El resultado es un precio histórico de limón cuyo costo sobrepasa los 2 quetzales por unidad en limón criollo y hasta 4 o 6 quetzales por limón persa.
Precios por las nubes
Nery Pérez, encargado del área de Comercio Internacional de la División de Planeamiento del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (Maga), señaló que el problema es de oferta y demanda. “Los productores prefieren vender afuera en donde pagan mejor”.
Pérez destacó que el precio por cada mil unidades de limón criollo se mantuvo, desde la semana pasada, a un precio de 550 quetzales (es decir 0.50 centavos por unidad, para mayoristas), mientras que las mil unidades de limón persa se venden a 1 mil 400 quetzales (1.40 quetzales por unidad).
Recuperación en mayo
Sin embargo, esto no durará para siempre, pues los altos precios son característicos de la época y las más de 7 mil hectáreas dedicadas a la cosecha de limones comenzarán a producir normalmente entre mayo y junio próximos, indicó Pérez.
Consultada al respecto, Silvia Escobar, jefa de la Dirección de Atención y Asistencia al Consumidor (Diaco), señaló que no es época de limón y los precios comenzaron a incrementarse desde diciembre pasado.