La foto ha dado la vuelta al mundo y refleja el drama de la migración de los refugiados sirios que huyen de la situación de su país. los cuerpos sin vida de dos niños ahogados en las costas del municipio de Bodrum (Turquía), alarmó a las autoridades europeas que buscan una solución inmediata.
Este miércoles, como se ha venido dando en noches anteriores, refugiados sirios intentaron cruzar desde Turquía hasta Grecia con el fin de escapar de su realidad y llegar a tierras europeas.
Sin embargo, son miles los que no han conseguido cruzar el mar Egeo. En lo que va de año, más de 2 mil personas perdieron la vida en el camino migratorio.
Según la agencia EFE, cada pasaje en la lancha neumática supone alrededor de 1 mil 500 dólares y no siempre tienen garantizada su llegada a la isla griega de Kos.
Los últimos días, la crisis humanitaria se agravó. En Serbia el número de refugiados alcanza casi los 8 mil, que esperan acceder al norte del continente a través de Hungría. Se calcula que a diario entre unos 3 mil más pasan por esta ruta.
Ética periodistica
La realidad de un conflicto armado quedó plasmada en esta imagen del cuerpo varado en la costa. Incluso ha supuesto un punto de inflexión en la forma de entender el problema.
La crudeza de la foto ha supuesto, además, un diálogo ético en los medios de comunicación. Es el caso del diario El Mundo, donde los editores debatieron la forma en la que publicar la imagen.
"Es una foto violenta emocionalmente. Lo grave de esta situación en Siria, lo representa esta imagen", explicaron en la reunión.