Don Amildo, así se le conocía y así le gustaba ser llamado al diputado de 76 años que este viernes murió en su finca en Mataquescuintla, Jalapa, por los golpes en cabeza y tórax, a causa de la embestida de uno de sus toretes.
Amildo de Jesús Morales Rodríguez no figuraba mucho en los medios de comunicación en su labor como diputado. En el Congreso y en Mataquescuintla se le recuerda como un hombre amable y humilde.
El diputado era un reconocido cafetalero y ganadero del oriente del país, a quien le gustaba supervisar su ganado lechero. “Lo hacía siempre muy temprano”, recuerda Julio Morales, uno de los sobrinos del congresista.
Morales representaba al departamento de Jalapa y formaba parte de las comisiones de trabajo de: Agricultura, Ganadería y Pesca; Extraordinaria de Frontera Sur; Energía y Minas; Extraordinaria del Programa de Reconstrucción Nacional; Extraordinaria Encargada del Estudio y Análisis para la Deslegalización.
Su sobrino dice que don Amildo “es un ejemplo de vida, esfuerzo y trabajo”.
Don Amildo casi siempre regresaba a Jalapa de la capital los jueves por la noche, dicen sus familiares, ese día dedicaba tiempo para reuniones con diversos sectores de Jalapa.
El diputado que llegó al Legislativo por la UCN, pero el año pasado decidió cambiarse al partido oficial.
Ayer le rindieron honras fúnebres en el Palacio Legislativo y este sábado se encuentra en una funeraria de Mataquescuintla, Jalapa, para que este domingo sea inhumado a las 10 de la mañana en el Cementerio General de esa localidad.