Las tres compañías de telefonía móvil que operan en el país: Tigo, Claro y Telefónica, se unieron para devolver seis millones de líneas, debido a que con el nuevo impuesto de cinco quetzales ya no serían rentables de comercializar.
El Congreso de la República aprobó hace dos semanas el Presupuesto del Estado 2015, incluyendo nuevos impuestos para la telefonía celular, el cemento y la extracción minera, así como bonos del tesoro y préstamos.
Cada empresa de telecomunicaciones devolvió a la Superintendencia de Telecomunicaciones (SIT) dos millones de líneas cada una, para un total de seis millones. Estas líneas no se encuentran activas y corresponden al inventario que las empresas de telefonía posee para satisfacer la demanda.
Según cifras de la SIT, actualmente existen 21.4 millones de líneas de teléfono, de las cuales 6 millones que fueron devueltas no están activas o se encuentran fuera de uso. Es decir, que el total de líneas se reduce a 15.4 millones, de las cuáles aún existen medidas que las empresas de telefonía podrían tomar.
Primer paso
Acisclo Valladares, presidente de la Gremial de las Empresas de Telecomunicaciones, señaló que se trata del primer paso que toman como gremio para reducir el monto de impuesto que deberán pagar. "Estas líneas no están generando ingresos, así que lo más conveniente para nosotros era devolverlas", agregó.
Valladares comentó que el segundo paso sería depurar los números de teléfono que recargan saldo por menos de 10 quetzales mensuales. Claro y Telefónica señalaron con anterioridad que esta cifra podría ser superior a los 6 millones de usuarios prepago. Sin embargo, es una medida que aún no se contempla.
"Depurar los números sería un siguiente paso, pero esperamos que eso no suceda y haremos los esfuerzos para que no pase. Devolver estos números es una forma para no afectar al usuario", señaló Valladares.
Menos ingresos tributarios
Esta medida afecta a los ingresos tributarios proyectados, los cuales se calcularon por más de 20 millones de líneas de celulares existentes en el país, donde se esperaba un ingreso por 1 mil 344 millones de quetzales.
Solo con esta reducción, las proyecciones disminuyen 30 millones de quetzales mensuales, es decir 360 millones de quetzales durante todo el 2015. Esto, sin incluir las líneas de teléfono que podrían ser depuradas a partir de enero del próximo año.
