La Policía de Colombia capturó a nueve presuntos guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en una operación simultánea en varios municipios del departamento del Cauca (suroeste), según fuentes policiales.
Los nueve subversivos están acusados de varias acciones delictivas en las que murieron un total de 12 uniformados, según especificó la Policía en un comunicado.
En concreto, se les adjudica el ataque a una oficina bancaria en 2011 en el que murieron cuatro policías, un tiroteo a varios vehículos policiales en 2012 en el que fallecieron seis agentes y, también durante ese año, según la institución, el asalto a una patrulla, donde perecieron otros dos uniformados.
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Las detenciones se producen poco más de un mes después de que las FARC iniciaran un alto al fuego unilateral e indefinido que, según varios informes independientes emitidos en el país, el grupo subversivo ha cumplido.
Al anunciar su tregua el pasado 17 de diciembre, la guerrilla advirtió que esta podría llegar a su fin si recibían ofensivas de la Fuerza Pública en su contra.
FARC asegura "constante hostilidad"
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) denunciaron nuevos ataques del Ejército colombiano contra sus fuerzas en los últimos días y consideraron que esa "constante hostilidad" atenta contra la tregua insurgente y el desescalamiento del conflicto. Desde La Habana, afirman que durante el alto al fuego han sufrido tres bajas de subversivos.
Desde el 20 de diciembre, día en que arrancó el cese el fuego unilateral e indefinido, las FARC han denunciado diversos operativos militares, como bombardeos y ataques terrestres, que los citados informes han corroborado.
